viernes, 29 de agosto de 2014

“Esperar en Dios” Meditación 29.8

Lectura en Filipenses 4.18-20 “Pero todo lo he recibido, y tengo abundancia; estoy lleno, habiendo recibido de Epafrodito lo que enviasteis; olor fragante, sacrificio acepto, agradable a Dios. 19 Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús. 20 Al Dios y Padre nuestro sea gloria por los siglos de los siglos. Amén”

Cada necesidad que experimentaremos en la vida ha sido ya suplida en Jesucristo. Por su poder, Dios ha preparado bendiciones para ocuparse de cada una de nuestras necesidades en su tiempo perfecto. A veces, cuando la vida no es exactamente lo que esperábamos que fuera, comenzamos a desesperarnos y olvidamos que el Señor sabe más que nosotros.

A veces, alguna necesidad -física, espiritual, interpersonal, emocional o económica- continúa porque el Señor está tratando de captar nuestra atención. Dios quiere que nos enfoquemos en Él para poder corregir nuestra manera de pensar. Desea que tengamos abundancia, pero sabe que no podemos disfrutar de la bendición hasta que le hayamos permitido que opere en nuestra vida.

En otras ocasiones, la manera en que nos acercamos a Dios puede ser lo que pone trabas a las bendiciones que ha prometido. Quizás nuestras oraciones reflejan sentimientos de inferioridad e inseguridad, aunque como miembros de la familia de Dios no tenemos ninguna razón para venir a nuestro Padre arrastrándonos como un mendigo. ¡Él quiere que sus hijos vengan con confianza, esperando recibir las bendiciones que anhela darles!

No malinterprete. Podemos esperar bendiciones, pero no podemos imponer cuándo, o cómo, o qué deben ser. Dios sabe lo que es mejor, y está de verdad interesado en nuestro bienestar. Y aunque no promete que todo será fácil, sí promete darnos consuelo espiritual y atender a cada una de nuestras necesidades. Mantenga la expectativa; Él va a hacer algo más allá de lo que usted pudiera haber imaginado.
(De Ministerios En Contacto)

lunes, 25 de agosto de 2014

"La Orden de Dios Para Cada Creyente”

Lectura bíblica en Mateo 28:16-20 "Pero los once discípulos se fueron a Galilea, al monte donde Jesús les había ordenado. 17 Y cuando le vieron, le adoraron; pero algunos dudaban. 18 Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. 19 Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; 20 enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén"

En el pasaje conocido como la Gran Comisión, el Señor Jesús menciona al discipulado, al bautismo y a la enseñanza. Todos estamos de acuerdo con que el discipulado y la enseñanza son esenciales para crecer en la fe; sin embargo, algunos cristianos relegan o ignoran la orden de ser bautizados. La voluntad de Dios es que cada persona que recibe la salvación ponga en práctica esta ordenanza bíblica dada por Jesucristo.
La Biblia contiene varios ejemplos de nuevos creyentes que se sometieron al bautismo por obediencia después de ser salvos. Pablo y Silas dijeron a su carcelero que recibiera a Cristo y que fuera bautizado (Hechos 16.27-33). Asimismo, Felipe bautizó al eunuco etíope después de escuchar su confesión de fe (Hechos 8.36-38).

Muchos creyentes hoy rehúsan a hacerlo porque no consideran al bautismo como un mandamiento, o porque no reconocen que no hacerlo es desobediencia. Este acto es importante porque es una confesión pública de fe en nuestro Dios (Padre, Hijo y Espíritu Santo). La disposición de humillarnos de esta manera honra a Dios como el Señor de nuestra vida. El bautismo por inmersión simboliza también el poder transformador de la salvación: Somos “sepultados” para demostrar que hemos muerto a los viejos hábitos; y somos levantados del agua para demostrar que ahora andamos en novedad de vida (Romanos 6.4).

¿Ha obedecido usted el mandamiento del Señor de someterse al bautismo? Si no lo ha hecho, hable con su pastor y dispóngase a confesar públicamente su fe en el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.
(De Ministerios en Contacto).

Lectura antes de iniciar labores: Tito 2 “Pero tú habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina. Que los ancianos sean sobrios, serios, prudentes, sanos en la fe, en el amor, en la paciencia. Las ancianas asimismo sean reverentes en su porte; no calumniadoras, no esclavas del vino, maestras del bien; que enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos, a ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas, sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada. Exhorta asimismo a los jóvenes a que sean prudentes; presentándote tú en todo como ejemplo de buenas obras; en la enseñanza mostrando integridad, seriedad, palabra sana e irreprochable, de modo que el adversario se avergüence, y no tenga nada malo que decir de vosotros. Exhorta a los siervos a que se sujeten a sus amos, que agraden en todo, que no sean respondones; no defraudando, sino mostrándose fieles en todo, para que en todo adornen la doctrina de Dios nuestro Salvador. Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres, enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente, aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo, quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras. Esto habla, y exhorta y reprende con toda autoridad. Nadie te menosprecie.”

sábado, 23 de agosto de 2014

“Lean la Biblia”

Jesús el único sacerdote:
Hebreos 4.14  Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión.

Hebreos 5.5  Así tampoco Cristo se glorificó a sí mismo haciéndose sumo sacerdote, sino el que le dijo: Tú eres mi Hijo, Yo te he engendrado hoy.

Hebreos 7-21-28  Porque los otros ciertamente sin juramento fueron hechos sacerdotes; pero éste, con el juramento del que le dijo: Juró el Señor, y no se arrepentirá: Tú eres sacerdote para siempre, Según el orden de Melquisedec. 22. Por tanto, Jesús es hecho fiador de un mejor pacto.23. Y los otros sacerdotes llegaron a ser muchos, debido a que por la muerte no podían continuar; 24.  Más éste, por cuanto permanece para siempre, tiene un sacerdocio inmutable; 25. Por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos. 26. Porque tal sumo sacerdote nos convenía: santo, inocente, sin mancha, apartado de los pecadores, y hecho más sublime que los cielos; 27. Que no tiene necesidad cada día, como aquellos sumos sacerdotes, de ofrecer primero sacrificios por sus propios pecados, y luego por los del pueblo; porque esto lo hizo una vez para siempre, ofreciéndose a sí mismo. 28. Porque la ley constituye sumos sacerdotes a débiles hombres; pero la palabra del juramento, posterior a la ley, al Hijo, hecho perfecto para siempre.

El Papa no tiene la autoridad de representar a Jesucristo:  
Mateo 23.9    Y no llaméis padre vuestro a nadie en la tierra; porque uno es vuestro Padre, el que está en los cielos.

Juan 14:16-17 Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre: 17. el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros.

Ni María ser mediadora:  
Mateo 12:46-50 Mientras él aún hablaba a la gente, he aquí su madre y sus hermanos estaban afuera, y le querían hablar. 47. Y le dijo uno: He aquí tu madre y tus hermanos están afuera, y te quieren hablar. 48. Respondiendo él al que le decía esto, dijo: ¿Quién es mi madre, y quiénes son mis hermanos? 49. Y extendiendo su mano hacia sus discípulos, dijo: He aquí mi madre y mis hermanos. 50. Porque todo aquel que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos, ése es mi hermano, y hermana, y madre.

1 Timoteo 2.5 Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre.

Dios no escucha vanas repeticiones:  
Mateo 6.7 Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos.

Mateo 21.22 Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis.

Marcos 12.40  que devoran las casas de las viudas, y por pretexto hacen largas oraciones. Estos recibirán mayor condenación.

La idolatría es fuertemente condenada en la Biblia:
Salmos 115:4-8   Los ídolos de ellos son plata y oro, Obra de manos de hombres. 5. Tienen boca, mas no hablan; Tienen ojos, más no ven; 6. Orejas tienen, mas no oyen; Tienen narices, mas no huelen; 7. Manos tienen, mas no palpan; Tienen pies, mas no andan; No hablan con su garganta. 8. Semejantes a ellos son los que los hacen, Y cualquiera que confía en ellos.

Romanos 1:23  y cambiaron la gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de aves, de cuadrúpedos y de reptiles.

Hechos 17:29  Siendo, pues, linaje de Dios, no debemos pensar que la Divinidad sea semejante a oro, o plata, o piedra, escultura de arte y de imaginación de hombres.

 Apocalipsis 9.20  Y los otros hombres que no fueron muertos con estas plagas, ni aun así se arrepintieron de las obras de sus manos, ni dejaron de adorar a los demonios, y a las imágenes de oro, de plata, de bronce, de piedra y de madera, las cuales no pueden ver, ni oír, ni andar.

Deuteronomio 5:8-10  No harás para ti escultura, ni imagen alguna de cosa que está arriba en los cielos, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. 9. No te inclinarás a ellas ni las servirás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen, 10. y que hago misericordia a millares, a los que me aman y guardan mis mandamientos.

Si con esto no es suficiente…sigue leyendo la Biblia… ahí están todas las respuestas!

El Espíritu Santo te ilumine

23.8.14

"Un Modelo Para la Oración" Meditación 23.8

Colosenses 1.10-14  (10. para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios; 11. fortalecidos con todo poder, conforme a la potencia de su gloria, para toda paciencia y longanimidad; 12. con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz; 13. el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo, 14. en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados)
Sigamos utilizando la oración de Pablo por los colosenses como modelo. Ayer estudiamos sus primeras dos peticiones —que entendieran la voluntad de Dios, y que vivieran dignamente para Él. Ahora consideraremos las otras cuatro. Que:
• Llevaran fruto en toda buena obra. El Señor desea que nuestras acciones lo glorifiquen. Parece ser que todos estamos muy ocupados, pero ¿tienen valor eterno lo que hacemos?
• Crecieran en el conocimiento de Dios. Hay mucha información bíblica disponible en libros, predicaciones e Internet. Pero el apóstol no estaba sugiriendo que los creyentes conocieran hechos en cuanto a Cristo. Habla de un conocimiento espiritual, no intelectual.
• Fueran fortalecidos con el poder de Dios. Somos débiles cuando nos apoyamos en nuestras propias fuerzas. A veces, es necesario que el Señor nos ponga de rodillas para que le entreguemos el control y confiemos en su poder. Mantener la confianza y el enfoque en medio de las dificultades requiere un poder más allá de nuestras fuerzas.
 Se mantuvieran agradecidos. Cuando entendemos de dónde provienen todas las cosas buenas, podemos vivir con gratitud. El contentamiento y el gozo tienen su origen en un corazón agradecido, no en las circunstancias.
Por el trajín del mundo de hoy, la oración muchas veces es dejada fuera de nuestra agenda. Pero la comunión con el Señor es vital para tener una buena relación con Él. Recuerde que orar por nuestros seres queridos ante el trono de Dios es mucho más importante que otras tareas que parecen más apremiantes.  (De Ministerios En Contacto)

“El Modelo de Oración Poderosa” Meditación 22.8

Lectura bíblica en Colosenses 1.9-10 (Por lo cual también nosotros, desde el día que lo oímos, no cesamos de orar por vosotros, y de pedir que seáis llenos del conocimiento de su voluntad en toda sabiduría e inteligencia espiritual, para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios)
Orar de manera efectiva no es algo que sabemos hacer de manera natural; para la mayoría de los creyentes es algo que necesitamos aprender. De hecho, uno de los discípulos que caminó con el Señor Jesús le pidió ayuda en cuanto a este asunto (Lucas 11.1).
A menudo escuchamos peticiones centradas en bendiciones, salud y protección. Y aunque está bien orar por cosas como esas, hay otra manera más poderosa, de orar: utilizando la Sagrada Escritura para hablar con el Padre celestial.
El apóstol Pablo es el autor del pasaje de hoy. Nos muestra las peticiones específicas que trajo al Señor en cuanto a la iglesia en Colosas. Ellas también se aplican a nosotros en la actualidad. Enfoquémonos en las dos primeras peticiones hoy, y en las cuatro restantes el fin de semana.
Pablo rogó a Dios que los cristianos de Colosas . . .
• Entendieran el plan de Dios para sus vidas. Aunque el Señor normalmente no revela todo de inmediato, dará a quienes le buscan suficiente información para que confíen en Él y obedezcan su dirección.
• Anduvieran de una manera digna de Cristo y agradable a Él. Pablo anhelaba ver que las vidas de los colosenses fueran cónsonas con su verdadera identidad espiritual (Gálatas 5.22, 23).
Uno de los regalos más grandes que podemos dar es orar por una persona. Y no hay una manera más poderosa de hacerlo que con las palabras de la Sagrada Escritura. Colosenses 1.9-14 es un bello ejemplo de un pasaje de cómo orar por nuestros seres queridos y por nosotros mismos ante el trono de Dios. (De Ministerios en Contacto)
Lectura antes de iniciar las labores, 
 Colosenses 1.9-14 (Por lo cual también nosotros, desde el día que lo oímos, no cesamos de orar por vosotros, y de pedir que seáis llenos del conocimiento de su voluntad en toda sabiduría e inteligencia espiritual, 10. para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios; 11. fortalecidos con todo poder, conforme a la potencia de su gloria, para toda paciencia y longanimidad; 12. con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz; 13. el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo, 14. en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados)

jueves, 21 de agosto de 2014

“Dónde Estás?” Meditación 21.8.14

Lectura bíblica en Génesis 3:7-13 Entonces fueron abiertos los ojos de ambos, y conocieron que estaban desnudos; entonces cosieron hojas de higuera, y se hicieron delantales. Y oyeron la voz de Jehová Dios que se paseaba en el huerto, al aire del día; y el hombre y su mujer se escondieron de la presencia de Jehová Dios entre los árboles del huerto.Mas Jehová Dios llamó al hombre, y le dijo: ¿Dónde estás tú? 10 Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba desnudo; y me escondí. 11 Y Dios le dijo: ¿Quién te enseñó que estabas desnudo? ¿Has comido del árbol de que yo te mandé no comieses? 12 Y el hombre respondió: La mujer que me diste por compañera me dio del árbol, y yo comí. 13 Entonces Jehová Dios dijo a la mujer: ¿Qué es lo que has hecho? Y dijo la mujer: La serpiente me engañó, y comí”

 Después de desobedecer a Dios, Adán y Eva se encontraron en una situación terrible. Su primera reacción fue ocultar la verdad en vez de reconocer lo que habían hecho. Las hojas de higuera no pueden jamás ocultar la raíz del pecado; pero incluso hoy, tenemos la misma actitud. En lugar de reconocer y confesar el pecado, buscamos esconderlo.
La segunda respuesta de Adán y Eva fue evitar a Dios. Ellos sabían que habían desobedecido, pero en vez de venir al Señor para restablecer su relación, se escondieron de Él por temor. ¿Alguna vez ha evitado orar o leer la Biblia por estar luchando con sentimientos de culpa?
Una tercera reacción fue tratar de evitar la responsabilidad personal, echando la culpa a otros. No obstante, cada uno de nosotros es responsable ante Dios por sus acciones, independientemente de las circunstancias o de quién esté involucrado.
Pero, a pesar del pecado de Adán y Eva y de sus maneras escurridizas de manejarlo, el Señor los buscó. Nuestro pecado nunca es demasiado grande como para mantener lejos a Dios; Él nos llama todavía y pregunta: “¿Dónde estás?” Él sabe lo que hemos hecho y por qué, pero nos hace esa pregunta para que nos demos cuenta de nuestra condición.
Nunca permita que la culpa o la vergüenza le mantengan alejado del Señor. Él busca a quienes han convertido sus vidas en un caos, y les habla por medio de su Palabra, de su Espíritu Santo y de su pueblo. 
El perdón y la reconciliación con Dios aguardan a todos los que estén dispuestos a escuchar, reconocer su pecado y arrepentirse.
(De Ministerios Encontacto.org)

miércoles, 20 de agosto de 2014

“Dios Perdona Nuestro Pecado” Meditación 20.8

Lectura bíblica en Efesios 1:3-8 “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo, 4 según nos escogió en él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él, 5 en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad, 6 para alabanza de la gloria de su gracia, con la cual nos hizo aceptos en el Amado, 7 en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia, 8 que hizo sobreabundar para con nosotros en toda sabiduría e inteligencia”

La Biblia es un manual de instrucciones con la ruta a nuestro hogar eterno! Pero los viajeros deben leer y seguir las indicaciones. Algunas personas creen que irán al cielo por su moralidad, sus prácticas religiosas, o incluso por su creencia de que Dios existe. Sin embargo, nada de eso garantiza la salvación.

El único camino que lleva al hogar eterno del Señor es la fe en Jesucristo (Juan 14.6). Así que la Biblia nos da tres indicadores a lo largo de la ruta:

Indicador No. 1: Soy pecador. Todos hemos pecado (Isaías 53.6; Romanos 3.23). Pero solamente alguien que esté bajo el poder de convicción de pecado del Espíritu Santo reconoce que el pecado es lo que le separa de Dios (Juan 9.31).

Indicador No. 2: Jesús es perfecto. El sacrificio perfecto de Cristo en la cruz es lo que atraviesa el abismo entre el Padre celestial y su creación. Nuestro Salvador pagó la deuda por el pecado pasado, presente y futuro.

Indicador No. 3: Necesito a Jesús. El momento decisivo en el viaje es el punto donde el viajero cree que Jesús es quien dijo ser. La fe tiene que estar acompañada por el arrepentimiento —dar la espalda a los antiguos pecados. El peregrino recibe una naturaleza nueva, y es acogido en la familia de Dios (2 Corintios 5.17; Juan 1.12).

¿Está usted en el camino para descubrir al Señor? He aquí una señal a lo que está delante de usted si persevera hasta el final: La redención (Romanos 3.24), la vida eterna (Juan 3.15), y la grandiosa aventura de caminar con Jesucristo. Confíe en el Salvador, y dele gracias por su misericordia y por su gracia.
(De Ministerios Encontacto)

Que el Espíritu Santo de Dios, revele las mentes y corazones de aquellos que lean esta reflexión. En el nombre de Jesús. Amén

martes, 19 de agosto de 2014

"Mientras más Profundo Vayas en Dios, Mayor Será tu Bendición"


Las bendiciones de Dios son tuyas. Cada una se obtiene de diferente forma, pero están a tu alcance para que las obtengas con fe y trabajo.

Cuando llegas al Reino de los cielos y aceptas a Jesús como tu único y suficiente Salvador, cuando cruzas la línea de la sangre y pasas de las tinieblas a la luz, llegas al otro lado y encuentras viñas y olivares que el Señor te da. Todo lo que Él ofrece por gracia demanda fe. Encuentra y toma lo que tu Padre te da gratuitamente, porque no tendrás que hacer nada más que creer y agradecer.

Hay bendiciones que no encontrarás en la orilla del cristianismo, tendrás que bogar mar adentro para encontrarlas; mientras más profundo vayas en Dios, mayor será tu bendición. El Señor da talentos de acuerdo a la capacidad del individuo; si quieres más talentos, agranda y ensancha tu capacidad.

Dios te motiva para que seas valiente y tengas deseo de obtener bendición, pero no puede obtenerla por ti. Reprende todo espíritu de pereza, temor y tibieza, hazte merecedor de todo lo que quiere darte el señor,y lucha por tomar posesión de tus bendiciones.

(De MensajesAlentadores.com)

“El Riesgo de Obedecer a Dios” Meditación 19.8

Lectura bíblica en Lucas 5:1-11 (Aconteció que estando Jesús junto al lago de Genesaret, el gentío se agolpaba sobre él para oír la palabra de Dios. Y vio dos barcas que estaban cerca de la orilla del lago; y los pescadores, habiendo descendido de ellas, lavaban sus redes. Y entrando en una de aquellas barcas, la cual era de Simón, le rogó que la apartase de tierra un poco; y sentándose, enseñaba desde la barca a la multitud. Cuando terminó de hablar, dijo a Simón: Boga mar adentro, y echad vuestras redes para pescar. Respondiendo Simón, le dijo: Maestro, toda la noche hemos estado trabajando, y nada hemos pescado; mas en tu palabra echaré la red. Y habiéndolo hecho, encerraron gran cantidad de peces, y su red se rompía. Entonces hicieron señas a los compañeros que estaban en la otra barca, para que viniesen a ayudarles; y vinieron, y llenaron ambas barcas, de tal manera que se hundían. Viendo esto Simón Pedro, cayó de rodillas ante Jesús, diciendo: Apártate de mí, Señor, porque soy hombre pecador. Porque por la pesca que habían hecho, el temor se había apoderado de él, y de todos los que estaban con él, y asimismo de Jacobo y Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón. Pero Jesús dijo a Simón: No temas; desde ahora serás pescador de hombres. Y cuando trajeron a tierra las barcas, dejándolo todo, le siguieron. )

Nadie podría haber sido más sorprendido por la orden del Maestro que Pedro. Después de trabajar arduamente toda la noche, ni él ni los otros pescadores tenían el fruto de sus esfuerzos. Estaban cansados y desanimados; la última cosa que querían hacer era lanzar otra vez las redes en otro intento inútil por atrapar unos pocos peces. ¿Qué podía estar pensando Jesús? ¿Qué propósito podía haber tenido al pedirles que salieran a pescar otra vez?

Poco tiempo después, cuando las abultadas redes eran arrastradas a la playa, estos hombres comenzaron a entender un principio eterno del que muchas personas no se han dado cuenta todavía: Dios nunca nos pedirá que hagamos algo, a menos que tenga un propósito específico y soberano para ello Jeremías 29.11.

La orden de Jesús debió haberles parecido innecesaria, por no decir disparatada. Después de todo, estos hombres eran expertos en la pesca; sin embargo, todavía les faltaba aprender que sin la intervención sobrenatural de Dios todopoderoso, nuestro esfuerzo es en vano.

Pedro y sus hombres nunca podrían haber imaginado qué clase de recompensa les esperaba por su obediencia. Lo que buscaban y deseaban más que nada era precisamente lo que Dios le dio: redes repletas de peces. La diferencia era que la segunda salida a pescar fue hecha a la manera de Dios y en el tiempo de Dios. 

Por tanto, confíe en los planes de Dios para usted. Nunca conocerá la recompensa hasta que esté dispuesto a correr el riesgo —cuanto mayor es el riesgo, mayor es la recompensa. (De Ministerios Encontacto.org)

lunes, 18 de agosto de 2014

“Fe y Obediencia” Meditación 18.8

Lectura bíblica en 1 Reyes 18:1-15 (Pasados muchos días, vino palabra de Jehová a Elías en el 3er. año, diciendo: Ve, muéstrate a Acab, y yo haré llover sobre la faz de la tierra. Fue, pues, Elías a mostrarse a Acab. Y el hambre era grave en Samaria. Y Acab llamó a Abdías su mayordomo. Abdías era en gran manera temeroso de Jehová. Porque cuando Jezabel destruía a los profetas de Jehová, Abdías tomó a 100 profetas y los escondió de 50 en 50 en cuevas, y los sustentó con pan y agua. Dijo, pues, Acab a Abdías: Ve por el país a todas las fuentes de aguas, y a todos los arroyos, a ver si acaso hallaremos hierba con que conservemos la vida a los caballos y a las mulas, para que no nos quedemos sin bestias. Y dividieron entre sí el país para recorrerlo; Acab fue por un camino, y Abdías fue separadamente por otro. Y yendo Abdías por el camino, se encontró con Elías; y cuando lo reconoció, se postró sobre su rostro y dijo: ¿No eres tú mi señor Elías? Y él respondió: Yo soy; ve, di a tu amo: Aquí está Elías. Pero él dijo: ¿En qué he pecado, para que entregues a tu siervo en mano de Acab para que me mate? Vive Jehová tu Dios, que no ha habido nación ni reino adonde mi señor no haya enviado a buscarte, y todos han respondido: No está aquí; y a reinos y a naciones él ha hecho jurar que no te han hallado. ¿Y ahora tú dices: Ve, di a tu amo: Aquí está Elías? Acontecerá que luego que yo me haya ido, el Espíritu de Jehová te llevará adonde yo no sepa, y al venir yo y dar las nuevas a Acab, al no hallarte él, me matará; y tu siervo teme a Jehová desde su juventud. ¿No ha sido dicho a mi señor lo que hice, cuando Jezabel mataba a los profetas de Jehová; que escondí a 100 varones de los profetas de Jehová de 50 en 50 en cuevas, y los mantuve con pan y agua? ¿Y ahora dices tú: Ve, di a tu amo: Aquí está Elías; para que él me mate? Y le dijo Elías: Vive Jehová de los ejércitos, en cuya presencia estoy, que hoy me mostraré a él.)

 Piense en la fe y la obediencia como compañeras de viaje que se dirigen al mismo destino, es decir, agradar y dar gloria al Señor. Usted no puede tener una sin la otra. Crecen simultáneamente al practicarse, pero se marchitarán si se descuidan.

Elías era un hombre con ambas cualidades. Le creía a Dios, y siempre respondía con obediencia. Cuando el Señor le dijo que se presentara ante el rey Acab, no dejó que el temor lo detuviera. Había aprendido que el Padre celestial era fiel y digno de confianza.

El temor pone trabas a la fe cuando comenzamos a dudar de que el plan de Dios sea realmente el mejor. Si permitimos que la preocupación gane terreno en nuestra mente, nos negaremos a hacer lo que diga el Señor. Al rechazar el camino de la fe y la obediencia estamos en realidad eligiendo la senda de la incredulidad y el pecado.

A Satanás le encanta que sintamos temor y desobedezcamos, para que así no recorramos el camino que Dios ha ideado para nosotros. No podemos creer que el Señor hará cosas grandes en un aspecto de nuestra vida si estamos permitiendo que haya pecado en otro. ¿Dónde ha flaqueado usted? ¿Le ha dado terreno al pecado? ¿Está negándose a obedecer algo que Dios dice en su Palabra?

La fe grande comienza con pasos pequeños. Si usted decide obedecer la Palabra de Dios, comenzará un ciclo cada vez mayor de fe y obediencia. No deje que el temor o el pecado le roben la gran aventura que el Señor ha planificado para su vida. ¿Quién puede elegir mejor el camino correcto —usted o Dios? (De Ministerios en Contacto)

Lectura antes de iniciar labores, Eclesiastés 3:1-15  Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora. Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado; tiempo de matar, y tiempo de curar; tiempo de destruir, y tiempo de edificar; tiempo de llorar, y tiempo de reir; tiempo de endechar, y tiempo de bailar; tiempo de esparcir piedras, y tiempo de juntar piedras; tiempo de abrazar, y tiempo de abstenerse de abrazar; tiempo de buscar, y tiempo de perder; tiempo de guardar, y tiempo de desechar; tiempo de romper, y tiempo de coser; tiempo de callar, y tiempo de hablar; tiempo de amar, y tiempo de aborrecer; tiempo de guerra, y tiempo de paz. ¿Qué provecho tiene el que trabaja, de aquello en que se afana? Yo he visto el trabajo que Dios ha dado a los hijos de los hombres para que se ocupen en él. Todo lo hizo hermoso en su tiempo; y ha puesto eternidad en el corazón de ellos, sin que alcance el hombre a entender la obra que ha hecho Dios desde el principio hasta el fin. Yo he conocido que no hay para ellos cosa mejor que alegrarse, y hacer bien en su vida; y también que es don de Dios que todo hombre coma y beba, y goce el bien de toda su labor. He entendido que todo lo que Dios hace será perpetuo; sobre aquello no se añadirá, ni de ello se disminuirá; y lo hace Dios, para que delante de él teman los hombres. Aquello que fue, ya es; y lo que ha de ser, fue ya; y Dios restaura lo que pasó”  

viernes, 15 de agosto de 2014

“Una Raíz Amarga” y "Veneno Amargo" Meditaciones 14 y 15 Agosto

“Una Raíz Amarga”             Meditación 15.8
Lectura bíblica en Hebreos 12.15 (Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados)

Ayer llegamos a la conclusión de que la amargura es un veneno que preparamos para otra persona, pero que terminamos tomándolo nosotros. Hoy pensaremos en otra ilustración útil que nos ayudará a entender los efectos negativos del resentimiento.

Hebreos 12.15 se refiere a la amargura como una “raíz”. Piense en esto. ¿Dónde se encuentran las raíces? Por debajo de la superficie succionando los nutrientes del terreno que está a su alrededor. Cada vez que vemos una planta, una flor o un árbol podemos estar seguros de que por debajo se encuentra una raíz que está absorbiendo vida de la tierra y enviándola a la planta.

¿Puede usted ver el paralelismo que hay entre esta ilustración y su vida espiritual? Quizás usted tenga una raíz de amargura que prácticamente sea invisible a cualquiera que pase a su lado. ¿Significa, entonces, que es inofensiva? ¡Por supuesto que no! Por el contrario, puede tener la seguridad de que la raíz está haciendo su trabajo —robándole su vida y utilizándola para alimentar una hierba mala de odio, impaciencia e insatisfacción.

Una raíz de amargura nunca producirá frutos saludables. Si la raíz es mala es absurdo esperar fruto bueno en lugar de mala hierba.

Sin embargo, podemos alegrarnos pues existe una medicina para este serio problema. Todo lo que necesitamos para matar la mala hierba es desenterrarla y deshacerse de la raíz. Saque la fuente de su resentimiento del lugar donde esté oculta. Reconózcala, y entréguela a Dios, quien sabe cómo cultivar el corazón.

“Veneno Amargo”            Meditación 14.8
Lectura bíblica en Efesios 4.31-32 (Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.)

Imagine a un científico triste, deprimido y encorvado en su laboratorio. Sus ojos están entrecerrados y sus labios fruncidos. Sus dedos están añadiendo una pizca de esto y un poquito de aquello al líquido verde en el tubo de ensayo que tiene en frente. Sus pensamientos son una mezcla de recuerdos; su corazón, un añejo mosaico de odio por un agravio que sucedió hace mucho tiempo. Está pensando en la persona que le hirió, mientras prepara un veneno para el ofensor.

Parece el extracto de una película antigua, ¿verdad? Pero es aquí donde la escena cambia de dirección. Imagine a ese mismo científico dando un suspiro de alivio cuando se endereza, maravillado del líquido de venganza que ha creado. Entonces dice: “Esto le enseñará” —y se bebe el veneno.

Ese es un giro sorpresivo que no esperaríamos en una película. Sin embargo, hay una buena posibilidad de que usted haya hecho esto mismo en un momento u otro.

La amargura es una toxina que preparamos para otra persona, pero después la bebemos nosotros mismos. Es 1 dosis concentrada de veneno emocional, que preparamos cuidadosamente y desarrollamos a lo largo de años. Cuando reaccionamos a la mala acción de alguien replegándonos y dando rienda suelta a fantasías de venganza y hostilidad, estamos envenenando lentamente nuestro corazón y nuestra mente.

Pídale a Dios que le muestre cualquier señal de veneno que haya en su ser. Dígale después que le ayude a administrar 1 dosis del antídoto: EL PERDON.

(De Ministerios en Contacto)

miércoles, 13 de agosto de 2014

“En Medio de las Pruebas” Meditación 13.8

Lectura en Génesis 39.6-20 (Y dejó todo lo que tenía en mano de José, y con él no se preocupaba de cosa alguna sino del pan que comía. Y era José de hermoso semblante y bella presencia. Aconteció después de esto, que la mujer de su amo puso sus ojos en José, y dijo: Duerme conmigo. Y él no quiso, y dijo a la mujer de su amo: He aquí que mi señor no se preocupa conmigo de lo que hay en casa, y ha puesto en mi mano todo lo que tiene. No hay otro mayor que yo en esta casa, y ninguna cosa me ha reservado sino a ti, por cuanto tú eres su mujer; ¿cómo, pues, haría yo este grande mal, y pecaría contra Dios? Hablando ella a José cada día, y no escuchándola él para acostarse al lado de ella, para estar con ella, aconteció que entró él un día en casa para hacer su oficio, y no había nadie de los de casa allí. Y ella lo asió por su ropa, diciendo: Duerme conmigo. Entonces él dejó su ropa en las manos de ella, y huyó y salió. Cuando vio ella que le había dejado su ropa en sus manos, y había huido fuera, llamó a los de casa, y les habló diciendo: Mirad, nos ha traído un hebreo para que hiciese burla de nosotros. Vino él a mí para dormir conmigo, y yo di grandes voces; y viendo que yo alzaba la voz y gritaba, dejó junto a mí su ropa, y huyó y salió. Y ella puso junto a sí la ropa de José, hasta que vino su señor a su casa. Entonces le habló ella las mismas palabras, diciendo: El siervo hebreo que nos trajiste, vino a mí para deshonrarme. Y cuando yo alcé mi voz y grité, él dejó su ropa junto a mí y huyó fuera. Y sucedió que cuando oyó el amo de José las palabras que su mujer le hablaba, diciendo: Así me ha tratado tu siervo, se encendió su furor. Y tomó su amo a José, y lo puso en la cárcel, donde estaban los presos del rey, y estuvo allí en la cárcel.)

La esclavitud de José duró trece años, y fue de mal en peor. Perdió su posición privilegiada en la casa de Potifar, y fue echado en prisión cuando la esposa de su amo lo acusó injustamente. Su esperanza de salir de la cárcel murió cuando el servidor del rey olvidó la promesa que le había hecho (Génesis 40.14, 23). El futuro se veía sombrío.

A pesar de la evidencia de las circunstancias, Dios estaba llevando a cabo su plan para bendecir a José y ayudar a su familia. José era la persona que Él había designado para salvarlos del hambre que vendría. Para lograrlo, José tuvo que aprender el idioma y familiarizarse con la cultura de Egipto, desarrollar habilidades de liderazgo y madurar espiritualmente. El plan del Señor logró todo esto.

José aprendió dos lecciones útiles.
1ero.: El Señor es un fiel compañero que utiliza nuestras aflicciones para prepararnos para su obra. Cuando llegó el momento, José estaba plenamente capacitado para convertirse en el segundo en autoridad, después de Faraón; el rey egipcio declaró incluso que la presencia de Dios estaba con José (Génesis 41.38).

2do.: Cuando el Señor logra sus propósitos, la dificultad terminará. En el momento elegido por Dios, José fue liberado de la cárcel, recompensado con un alto cargo y reconciliado con sus hermanos. Es decir, fue bendecido grandemente por vivir en el centro de la voluntad del Padre celestial.

La adversidad puede ser dolorosa, pero el Señor la utiliza para llevar adelante sus propósitos y prepararnos para su plan, e incluso Jesús sufrió para cumplir con el propósito redentor de Dios (Mateo 16.21).
(De Ministerios en Contacto)

Lectura antes de iniciar labores: Salmos 56 “Ten misericordia de mí, oh Dios, porque me devoraría el hombre; Me oprime combatiéndome cada día. Todo el día mis enemigos me pisotean; Porque muchos son los que pelean contra mí con soberbia. En el día que temo, Yo en ti confío. En Dios alabaré su palabra; En Dios he confiado; no temeré; ¿Qué puede hacerme el hombre? Todos los días ellos pervierten mi causa; Contra mí son todos sus pensamientos para mal. Se reúnen, se esconden, Miran atentamente mis pasos, Como quienes acechan a mi alma. Pésalos según su iniquidad, oh Dios, Y derriba en tu furor a los pueblos. Mis huidas tú has contado; Pon mis lágrimas en tu redoma; ¿No están ellas en tu libro? Serán luego vueltos atrás mis enemigos, el día en que yo clamare; Esto sé, que Dios está por mí. En Dios alabaré su palabra; En Jehová su palabra alabaré. En Dios he confiado; no temeré; ¿Qué puede hacerme el hombre? Sobre mí, oh Dios, están tus votos; Te tributaré alabanzas. Porque has librado mi alma de la muerte, Y mis pies de caída, Para que ande delante de Dios En la luz de los que viven”

"El Honor es Mejor Que los Honores" de Renuevo de Plenitud

I Samuel 2:30   ...Porque yo honraré a los que me honran...
Salmos 25:21   ...Integridad y rectitud me guarden; Porque en ti he esperado.
Salmos 84:11  ...Porque sol y escudo es Dios: Gracia y gloria dará el Señor: No quitará el bien á los que en integridad andan.
Proverbios 20:7 ...El justo que camina en su integridad, Bienaventurados serán sus hijos después de él.

El ambiente estaba Cargado de mucha tensión. Rosa Elliot llegó a la cuarta ronda del concurso nacional de ortografía en Washington. Se le había pedido a la pequeña de 11 años de Carolina del Sur que deletreara la palabra "admisión". Ella lo hizo con su suave acento sureño, pero los jueces no fueron capaces de determinar si había pronunciado una "o" o una "a" como letra al lado de la última.

Debatieron entre sí por varios minutos mientras escuchaban las grabaciones. Sin embargo, la letra decisiva tenía su acento demasiado marcado como para descifrarla. Finalmente el jefe de los jueces le preguntó a la única persona que conocía la respuesta.

- Era una letra "a" o una "o" ?. Le preguntó a Rosa. En ese momento estando rodeada por jóvenes concursantes que murmuraban entre ellos, Rosa sabía el correcto deletreo de la palabra. Tranquilamente, sin titubear, contestó que había pronunciado mal la palabra y se fue del escenario.

Todo el auditorio se puso de pie y aplaudió, incluyendo unos cincuenta reporteros gráficos. El momento fue emocionante y lleno de orgullo para sus padres. Aun vencida era victoriosa. En efecto, con el pasar de los años, ¡se escribió más acerca e Rosa Elliot que sobre el "desconocido" ganador del concurso!
Ser una persona que ama la verdad, aun cuando esta va en contra de uno, nos reviste de gran honor...

martes, 12 de agosto de 2014

“Cómo Caminar por los Valles de Oscuridad”

Lectura bíblica en Génesis 37:18-28 (Cuando ellos lo vieron de lejos, antes que llegara cerca de ellos, conspiraron contra él para matarle. Y dijeron el uno al otro: He aquí viene el soñador. Ahora pues, venid, y matémosle y echémosle en una cisterna, y diremos: Alguna mala bestia lo devoró; y veremos qué será de sus sueños. Cuando Rubén oyó esto, lo libró de sus manos, y dijo: No lo matemos. Y les dijo Rubén: No derraméis sangre; echadlo en esta cisterna que está en el desierto, y no pongáis mano en él; por librarlo así de sus manos, para hacerlo volver a su padre. Sucedió, pues, que cuando llegó José a sus hermanos, ellos quitaron a José su túnica, la túnica de colores que tenía sobre sí; y le tomaron y le echaron en la cisterna; pero la cisterna estaba vacía, no había en ella agua. Y se sentaron a comer pan; y alzando los ojos miraron, y he aquí una compañía de ismaelitas que venía de Galaad, y sus camellos traían aromas, bálsamo y mirra, e iban a llevarlo a Egipto. Entonces Judá dijo a sus hermanos: ¿Qué provecho hay en que matemos a nuestro hermano y encubramos su muerte? Venid, y vendámosle a los ismaelitas, y no sea nuestra mano sobre él; porque él es nuestro hermano, nuestra propia carne. Y sus hermanos convinieron con él. Y cuando pasaban los madianitas mercaderes, sacaron ellos a José de la cisterna, y le trajeron arriba, y le vendieron a los ismaelitas por veinte piezas de plata. Y llevaron a José a Egipto.)

Cuando era adolescente, José lo perdió casi todo: su familia, hogar y libertad. ¡Qué desconcertado debió haberse sentido por el odio de sus hermanos y por esas pérdidas tan aplastantes! Pero lo que nunca perdió fue su fe en Dios.

La vida normalmente es así. Los cambios repentinos en la salud o en las finanzas, la muerte inesperada de un ser querido, o la deslealtad de un buen amigo puede llevarnos a un tiempo de oscuridad. No entendemos por qué el Señor ha permitido la prueba o dejado que el dolor siga. José probablemente se preguntaba lo mismo, pero supo aferrarse a su fe. Incluso como esclavo en una tierra extranjera experimentó la bendición de la presencia de Dios. Y al reconocer que el Señor estaba con este joven cautivo, su amo egipcio se mostró favorable a él (Génesis 39.2, 3).

La clave para caminar por los valles de oscuridad —tiempos cuando la vida parece estar desmoronándose y el futuro se ve lúgubre— es aceptar la realidad de la presencia del Señor con nosotros. En el momento en que una persona acepta a Cristo como salvador, el Espíritu Santo viene a vivir dentro de ella y la sella como propiedad de Dios para siempre. Gracias al Espíritu Santo que mora en nosotros, nunca prescindimos de la ayuda de Dios. Ninguna circunstancia, sufrimiento o pérdida puede separarnos de Él o de su amor (Romanos 8.35, 38, 39).

Tome unos minutos cada día para reflexionar en la promesa que nos hizo Jesús de que estaría con nosotros siempre (Mateo 28.20). Tal verdad se afincará en lo profundo de su alma y le sostendrá en los momentos difíciles. (De Ministerios en Contacto)
Lectura antes de iniciar labores: Lucas 13:3-9 Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. O aquellos dieciocho sobre los cuales cayó la torre en Siloé, y los mató, ¿pensáis que eran más culpables que todos los hombres que habitan en Jerusalén? Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. Dijo también esta parábola: Tenía un hombre una higuera plantada en su viña, y vino a buscar fruto en ella, y no lo halló. Y dijo al viñador: He aquí, hace tres años que vengo a buscar fruto en esta higuera, y no lo hallo; córtala; ¿para qué inutiliza también la tierra? El entonces, respondiendo, le dijo: Señor, déjala todavía este año, hasta que yo cave alrededor de ella, y la abone. Y si diere fruto, bien; y si no, la cortarás después.

sábado, 9 de agosto de 2014

“Los Resultados de la Inseguridad” Meditación 9 Agosto

Lectura bíblica en Salmos 143.8 (Hazme oír por la mañana tu misericordia, porque en ti he confiado; hazme saber el camino por donde ande, porque a ti he elevado mi alma)
 Ya hemos identificado algunas de nuestras inseguridades. Ahora, necesitamos dirigir nuestra atención a sus efectos.

Para empezar, las personas inseguras tienen dificultades para establecer relaciones buenas y duraderas. Simplemente no son capaces de entender cómo pudieran añadir valor a la vida de alguien. Esto es una tragedia, porque cada uno de nosotros necesita tener amistades que nos ayuden a crecer.

Asimismo, las personas inseguras son vistas a menudo como orgullosas y presumidas. La falta de confianza en sí mismas puede hacer que se distancien de los demás, lo que puede confundirse fácilmente con arrogancia. Pueden, por ello, dar la impresión de que simplemente no quieren estar con las demás personas.

Además, la inseguridad lleva con frecuencia a la indecisión y al temor. Las personas pueden estar tan intimidadas por sus dudas que les resulte imposible tomar decisiones. Se preguntan: ¿Y si cometo un error? Bueno, ¿qué puede pasar? Cometer errores es una de las mejores maneras de aprender cómo hacer algo correctamente. No tenga temor de intentarlo. Incluso, si no tiene éxito, al menos puede descansar en el hecho de que hizo lo más que pudo.

Al cabo de un tiempo, las personas inseguras generalmente se exasperan y comienzan a molestarse por el éxito y la felicidad de los demás. No permita que esa calamidad afecte sus relaciones. Ore por la capacidad de reconocer sus inseguridades, y luego dé un paso hacia la libertad pidiendo al Señor que las sane.

 (De Ministerios En Contacto)

jueves, 7 de agosto de 2014

7 Consejos para todo predicador...

“El Ayudador en el Estudio de la Biblia”

Lectura bíblica en 1 Corintios 2:12-16 (Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que proviene de Dios, para que sepamos lo que Dios nos ha concedido, 13 lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las que enseña el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual. 14 Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente. 15 En cambio el espiritual juzga todas las cosas; pero él no es juzgado de nadie. 16 Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.)

La Biblia es la revelación de la verdad de Dios, y está concebida para su uso regular por todo creyente. La presencia interior del Espíritu Santo es una necesidad, ya que es Él quien aclara el significado de la Palabra de Dios. El Espíritu Santo ilumina la mente de cada persona que busca realmente conocer a Dios.

Cuando leemos la Biblia, el Ayudador abre nuestro entendimiento para que conozcamos el verdadero significado del texto, de modo que podamos comprender sus implicaciones. Nunca podremos dejar de necesitarlo. Incluso un creyente con años de experiencia en el estudio de la Palabra, requiere de tanta revelación como un niño espiritual que acaba de recibir a Cristo. Recientemente, tuve motivos para recordar este hecho al leer un pasaje que había visto a menudo en mis estudios. Por primera vez, mi alma se abrió del todo a estos versículos, la verdad entró como un torbellino y me sentí revitalizado. Captar una nueva verdad nos anima a poner en práctica lo que hemos aprendido. Luego, cuando integramos esa verdad a nuestra vida, el Espíritu de Dios nos revela otra para hacernos cada vez más como nuestro Salvador.

Conocer a Dios y conformarse a la imagen de Jesucristo, son las más altas aspiraciones de la vida cristiana, y podemos lograr estos objetivos solo si conocemos y ponemos en práctica los principios bíblicos con un corazón limpio. Si queremos que el Espíritu Santo nos revele el significado de la Escritura, debemos pedirle primero que nos muestre nuestro pecado. Cuando nos arrepentimos de la falta que nos hace recordar a nuestro Ayudador, nuestro corazón se abre a su iluminación. (De Ministerios En Contacto)

Lectura antes de iniciar las labores: Salmos 14
1. Dice el necio en su corazón: No hay Dios. Se han corrompido, hacen obras abominables; No hay quien haga el bien.    2. Jehová miró desde los cielos sobre los hijos de los hombres, Para ver si había algún entendido, Que buscara a Dios.    3. Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno.     4. ¿No tienen discernimiento todos los que hacen iniquidad, Que devoran a mi pueblo como si comiesen pan, Y a Jehová no invocan?    5. Ellos temblaron de espanto; Porque Dios está con la generación de los justos.    6. Del consejo del pobre se han burlado, Pero Jehová es su esperanza.     7. ¡Oh, que de Sion saliera la salvación de Israel! Cuando Jehová hiciere volver a los cautivos de su pueblo, Se gozará Jacob, y se alegrará Israel.

martes, 5 de agosto de 2014

Sólo Hay un Lugar Para tu Bendición


La Biblia nos dice que las bendiciones te alcanzarán. Pero debes estar en el lugar correcto. Donde Dios te prometió. Lo hizo con los discípulos y lo mismo para nosotros. El les dijo esperen la promesa y le dio el lugar específico. (Hechos 1:4).

Cuando te mueves sin Dios moverte, estás fuera de la cobertura y cuando estás fuera cualquier cosa te puede pasar. Si miramos a Noemí ella se fue de Belén (significa casa de pan) a la tierra de Moab, con su esposo y 2 hijos (Rut 1:1). Sólo quedó ella y sus 2 nueras. Ella culpó a Dios por esas pérdidas (Rut1:20) y hasta cambió su nombre.

Como todo obra para bien, ella vuelve a Belén. Al lugar donde Dios le daría la bendición y Dios la pone en un lugar especial y es la descendencia de los reyes.

No nos movamos del lugar de bendición. No permitas que te pase lo peor para que regreses a la tierra de bendición. Donde Dios te dijo que te iba a bendecir.

Esperemos paciente al Dios de los cielos.

Examina si estás en el lugar correcto, sino corre por tu vida. El enemigo sabe cuál es tu lugar por eso te distrae y quiere que salgas de él.

“Un Ayudador Para Todas las Ocasiones”

Lectura bíblica en Juan 14:16-18 (Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre: el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros. No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros.)

¿Ha deseado usted alguna vez tener una línea telefónica de emergencia que repique en el cielo? La verdad es que tenemos algo mucho mejor: el Espíritu Santo vive en nosotros para ayudarnos.

La noche antes de su crucifixión, el Señor Jesús dijo a sus discípulos que estaba a punto de partir. La noticia probablemente los entristeció, a pesar de que no era la primera vez que había hablado de su muerte. Pero el Señor afirmó que les enviaría otro Consolador o Ayudador. La palabra griega traducida como “otro” implica que el nuevo Ayudador sería como el anterior —en otras palabras, un ser divino con acceso al Padre celestial. Tal como lo prometió, el Espíritu de Dios viene a morar en cada persona que recibe a Jesucristo como Salvador (Hechos 2.1-4).

Nuestro Ayudador tiene un papel distintivo dentro de la Trinidad. El Padre reina sobre todo, en tanto que el Hijo está a su diestra intercediendo por los creyentes. Mientras tanto, el Espíritu Santo nos capacita para llevar a cabo la obra que Dios ha dispuesto que hagamos.

El Padre celestial sabía que no podíamos obedecerle sin ayuda; es por eso que Jesús dijo a los discípulos que permanecieran en Jerusalén hasta después de la llegada del Espíritu Santo. Sea lo que sea que estemos llamados a hacer en nuestra obediencia diaria, o en nuestra responsabilidad para toda la vida, nuestro Ayudador nos brinda dirección, y nos da fuerzas y aliento.

El Espíritu Santo es parte de nosotros, más que nuestros huesos y nuestra sangre. Somos privilegiados por tener un Ayudador divino que nos guía en el camino de la voluntad de Dios. (De Ministerios en Contacto).

Lectura antes de iniciar las labores: Job 11:2-15… Cuánta sabiduría!
2. ¿Las muchas palabras no han de tener respuesta? ¿Y el hombre que habla mucho será justificado?
3. ¿Harán tus falacias callar a los hombres? ¿Harás escarnio y no habrá quien te avergüence?
4. Tú dices: Mi doctrina es pura, Y yo soy limpio delante de tus ojos.
5. Mas ¡oh, quién diera que Dios hablara, Y abriera sus labios contigo,
6. Y te declarara los secretos de la sabiduría, Que son de doble valor que las riquezas!
Conocerías entonces que Dios te ha castigado menos de lo que tu iniquidad merece.
7. ¿Descubrirás tú los secretos de Dios? ¿Llegarás tú a la perfección del Todopoderoso?
8. Es más alta que los cielos; ¿qué harás? Es más profunda que el Seol; ¿cómo la conocerás?
9. Su dimensión es más extensa que la tierra, Y más ancha que el mar.
10. Si él pasa, y aprisiona, y llama a juicio, ¿Quién podrá contrarrestarle?
11. Porque él conoce a los hombres vanos; Ve asimismo la iniquidad, ¿y no hará caso?
12. El hombre vano se hará entendido, Cuando un pollino de asno montés nazca hombre.
13. Si tú dispusieres tu corazón, Y extendieres a él tus manos;
14. Si alguna iniquidad hubiere en tu mano, y la echares de ti, Y no consintieres que more en tu casa la injusticia,  15. Entonces levantarás tu rostro limpio de mancha, Y serás fuerte, y nada temerás;

viernes, 1 de agosto de 2014

Consejo 1.8.14

"Plenamente Vivo en Cristo" Meditación 1.8.14

Lectura bíblica en 1 Corintios 15.22 (Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados.)
Puesto que el apóstol Pablo reconocía las limitaciones del entendimiento humano, utilizaba metáforas para explicar conceptos espirituales. En varias de sus epístolas escribió acerca de estar “vivos en Cristo”.

Señalaba que antes de que el Señor nos salvara estábamos muertos espiritualmente. Pero una vez que recibimos a Jesús como nuestro Salvador, pasamos a estar vivos en Él (Romanos 6.11).

Pablo quería que entendiéramos que tenemos una nueva libertad, nueva naturaleza y nuevo patrón de conducta. Para ejemplificarlo, escogió las imágenes de la circuncisión y el bautismo (Colosenses 2.9-17), los cuales proporcionan un punto de partida para que comprendamos la verdad fundamental de la gloria de estar vivos en el Señor.

Si utilizamos el razonamiento humano para comprender una verdad espiritual como ésta, seremos confundidos. Solo por medio de la enseñanza del Espíritu Santo podemos comenzar a comprender todo su significado. Además, la Palabra de Dios viva debe ser experimentada. Podemos conocer el hecho de que Jesús nos ha dado una nueva naturaleza, pero solo cuando experimentemos esta nueva naturaleza y la libertad que ella da, descubrimos realmente el significado bíblico de haber sido “vivificados”.

Piense en el bautismo y la circuncisión. Haga a un lado la lógica humana y confíe en el Espíritu Santo para entenderlo. Acepte que usted es una nueva creación —que la vieja naturaleza ha desaparecido y ha sido sustituida por la nueva (2 Corintios 5.17). El gozo espiritual llenará su ser cuando experimente la verdad de estar plenamente vivo en Cristo. (De Ministerios En Contacto)

Nuestra lectura antes de iniciar las labores: Rut capitulo 1…Les invito a leerlo para que puedan ver un ejemplo de convicción verdadero en Rut.

DOMINGO... SOLEDAD QUE ABRUMA

Domingo 28.04.24 Hebreos 13.5,6,8 “Sean sus costumbres sin avaricia, contentos con lo que tienen ahora; porque él dijo: No te desampararé...