viernes, 16 de febrero de 2018

“Cuando tenemos todas las de perder”


Meditación 16.02.18

Jueces 7.1-8Levantándose, pues, de mañana Jerobaal, el cual es Gedeón, y todo el pueblo que estaba con él, acamparon junto a la fuente de Harod; y tenía el campamento de los madianitas al norte, más allá del collado de More, en el valle. Y Jehová dijo a Gedeón: El pueblo que está contigo es mucho para que yo entregue a los madianitas en su mano, no sea que se alabe Israel contra mí, diciendo: Mi mano me ha salvado. Ahora, pues, haz pregonar en oídos del pueblo, diciendo: Quien tema y se estremezca, madrugue y devuélvase desde el monte de Galaad. Y se devolvieron de los del pueblo 22,000, y 10,000. Y Jehová dijo a Gedeón: Aún es mucho el pueblo; llévalos a las aguas, y allí te los probaré; y del que yo te diga: Vaya éste contigo, irá contigo; más de cualquiera que yo te diga: Este no vaya contigo, el tal no irá. Entonces llevó el pueblo a las aguas; y Jehová dijo a Gedeón: Cualquiera que lamiere las aguas con su lengua como lame el perro, a aquél pondrás aparte; asimismo a cualquiera que se doblare sobre sus rodillas para beber. Y fue el número de los que lamieron llevando el agua con la mano a su boca, 300 hombres; y todo el resto del pueblo se dobló sobre sus rodillas para beber las aguas. Entonces Jehová dijo a Gedeón: Con estos 300 hombres que lamieron el agua os salvaré, y entregaré a los madianitas en tus manos; y váyase toda la demás gente cada uno a su lugar. Y habiendo tomado provisiones para el pueblo, y sus trompetas, envió a todos los israelitas cada uno a su tienda, y retuvo a aquellos 300 hombres; y tenía el campamento de Madián abajo en el valle”.

La historia de Gedeón ofrece orientación bíblica para los momentos en que la derrota parece inminente. Sin importar cuáles sean nuestras dificultades, el Señor puede demostrar su poder maravilloso para liberarnos.

Dios utiliza la dificultad para aumentar nuestra fe. Gedeón estaba dispuesto a creerle a Dios y a enfrentarse a un ejército 4 veces más grande que el suyo. Aprendemos a confiar en el Señor por medio de la experiencia. A veces, Dios nos coloca en situaciones sumamente difíciles para que descubramos su fidelidad. Puede que prefiramos aprender a tener fe leyendo un libro, pero el Señor sabe que la mejor aula es una situación de total dependencia.

Dios puede pedirnos que hagamos lo que parece absurdo. Los israelitas ya estaban en desventaja numérica, pero el Señor le ordenó a Gedeón que redujera el ejército a solo 300 hombres. ¡Eso hizo que las probabilidades fueran de 450 a 1! Aunque los caminos de Dios puedan parecer ilógicos para nosotros, su sabiduría y su poder son mucho más grandes que los nuestros, y podemos confiar en su plan.

Dios nos guía a hacer lo que lo glorifica. El ejército de Gedeón era tan pequeño que sus hombres no podrían, de ninguna manera, atribuirse el mérito de la victoria. El Señor se complace en demostrar su poder asombroso y su gloria por medio de nuestra debilidad e incapacidad.

Piense en las dificultades de la vida como oportunidades para que el Señor aumente su fe y le prepare para el ministerio. Él utiliza a quienes están dispuestos a obedecerle, incluso cuando la tarea parezca absurda o imposible. Dios se complace en mostrar su fidelidad a quienes confían en Él, a pesar de la situación.
(De Encontacto)


”Tu palabra sabia de hoy”

Viernes 16.2.18

Lucas 24:25 “Entonces él les dijo: ¡Oh insensatos, y tardos de corazón para creer todo lo que los profetas han dicho!”

¿Te has preguntado alguna vez por qué los discípulos, después de 3 años de sentarse bajo la bendita predicación del Salvador del mundo, seguían ciegos y sin preparación para lo que vendría? ¡Es que ellos no escuchaban con fe! Por eso, en diversas ocasiones, Jesús tuvo que reprenderlos.

“¿Por qué teméis, hombres de poca fe?” (Mat.8:26). Sus corazones eran lentos para creer en Su Palabra. Se quedaron confundidos y cegados por la incredulidad.

Si Jesús se ocupó de la incredulidad de los discípulos mientras estuvo en la tierra, ¿qué pensará de nosotros hoy?

Nínive se arrepintió después de sólo un sermón, creyendo cada palabra que predicó Jonás. Sin embargo, América ha oído miles de advertencias por parte de muchos profetas, pero muchos, que dicen estar “llenos del Espíritu Santo”, no los escuchan...ni se arrepienten como manda el Señor.

¿Cuánto de lo que has escuchado recuerdas? ¿Cuán profundo, lo escuchado, ha obrado en tu vida espiritual?

Si la Palabra de Dios no es asimilada por la fe, si no le pedimos, en fe, que nos ayude a recibirla y usarla, terminaremos tomando y eligiendo sólo lo que nos gusta. Y usualmente tomamos las bendiciones, las misericordias y las comodidades; desechando las exigencias, reprensiones y advertencias.

La confianza en Dios hace que Su Palabra obre en nuestro espíritu; la fe lo estampa en nuestra personalidad, corazón y mente, para no olvidarla.

¡Feliz día y que Dios te bendiga!

Wilda M.V.
(Referencia: worldchallengeorg.  David Wilkerson)

jueves, 15 de febrero de 2018

“Confusión en cuanto a la salvación”  


Meditación 15.02.18

1 Juan 5.11-15Y este es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en su Hijo. El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida. Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios. Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho”.

Dios nunca trata de engañar o confundir a los creyentes. Él quiere que tengamos confianza en cuanto a nuestra salvación y ha explicado claramente el plan. Sin embargo, sí hay alguien que quiere confundirnos: Satanás, quien sabe que las dudas nos harán menos efectivos.

Veamos las 4 estrategias principales que utiliza:
1. El pecado. Cuando cedemos a la tentación, nuestro enemigo pone sobre nosotros un sinfín de sentimientos de culpa para que pensemos: ¿Cómo puedo ser salvo si estoy viviendo así? Pero la Biblia nos asegura que no hay ninguna condena para los creyentes en Cristo (Romanos 8.1).

2. La ignorancia. Si no estamos inmersos en la Palabra de Dios, es fácil tener una imprecisa noción de lo que sucedió cuando vinimos a la fe. Pero si estamos bien fundamentados, es menos probable que dudemos de nuestra salvación.

3. Los sentimientos. Una vez que somos salvos, nada puede arrebatarnos de la mano del Padre (Juan 10. 28, 29). No obstante, el pesar y la vergüenza pueden hacer que deseemos ocultarnos, en vez de confesar y mantener limpias las líneas de comunicación con Dios (vea Génesis 3.8; 1 Juan 1.9). Tenga en cuenta que los sentimientos no tienen nada que ver con la verdad de que hemos sido salvos.

4. El acoso. A veces, el diablo viene hacia nosotros como un león rugiente, y otras veces como un ángel de luz (1 Pedro 5.8; 2 Corintios 11.14). Cualquiera que sea su táctica, él quiere que quitemos nuestra mirada de Jesús. Pero la Palabra de Dios promete que ninguna arma forjada contra los creyentes prosperará (Isaías 54.17).

Dedicar tiempo a la Palabra de Dios le ayudará a mantenerse seguro de su salvación y a estar mejor preparado para rechazar las estrategias de Satanás. (De Encontacto)

"Tu palabra sabia de hoy"

Jueves 15.2.18

1 Pedro 5:6-7 "Humillaos bajo la poderosa mano de Dios, para que él les exalte cuando fuere tiempo; echando todas sus ansiedades sobre él, porque él tiene cuidado de ustedes”.

"Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; no dejará para siempre caído al justo" (Salmos 55:22).

¿Cómo encuentra un creyente sincero la “cura” para la incredulid, cómo deshacerse de la duda en el corazón?

-Llevando cada preocupación, temor y carga a Jesús, ¡y dejándolos sobre sus hombros!

Una palabra personal de Dios para ti:
  No cargues esa carga una hora más. Yo tengo cuidado de todo lo que te está sucediendo y soy lo suficientemente grande como para llevarlo todo por ti.

¡Dios nunca está  estresado ni sobrecargado. Sus hombros pueden soportar el peso de todos sus hijos a la vez! Él nos urge a dejarlo todo sobre él.

Revisa tu lista de cargas ahora mismo y dile a Dios: “Padre, te doy este problema, este desafío, esta relación”. ¡Y convéncete de que él tiene cuidado!

Luego, lánzate con una fe plena en la Palabra escrita de Dios. Acepta el desafío del Señor, de vivir de acuerdo a su Palabra. “No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios” (Mat. 4:4). Tú debes ser capaz de decir: ¡Viviré y moriré por la Palabra de Dios!

Dios es poderoso para guardarte sin caída, y presentarte sin mancha delante de su gloria con gran alegría” (Judas 24).

Deja que Dios se haga cargo de sostenerte. Simplemente toma su palabra y dile que vas a confiarle tu vida. ¡Demuéstrale que confías en cada una de sus palabras, y sé bendecido!

Feliz día y que Dios te bendiga!🙏🏼

Wilda M.V.
(Referencia: World Challengeorg. "La cura para la incredulidad"
David Wilkerson)

miércoles, 14 de febrero de 2018

“El poder del amor”


Meditación 14.02.18

Lucas 15.11-24 También dijo: Un hombre tenía dos hijos; y el menor de ellos dijo a su padre: Padre, dame la parte de los bienes que me corresponde; y les repartió los bienes. No muchos días después, juntándolo todo el hijo menor, se fue lejos a una provincia apartada; y allí desperdició sus bienes viviendo perdidamente. Y cuando todo lo hubo malgastado, vino una gran hambre en aquella provincia, y comenzó a faltarle. Y fue y se arrimó a uno de los ciudadanos de aquella tierra, el cual le envió a su hacienda para que apacentase cerdos. Y deseaba llenar su vientre de las algarrobas que comían los cerdos, pero nadie le daba. Y volviendo en sí, dijo: !!Cuántos jornaleros en casa de mi padre tienen abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre! Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti. Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme como a uno de tus jornaleros. Y levantándose, vino a su padre. Y cuando aún estaba lejos, lo vio su padre, y fue movido a misericordia, y corrió, y se echó sobre su cuello, y le besó. Y el hijo le dijo: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, y ya no soy digno de ser llamado tu hijo. Pero el padre dijo a sus siervos: Sacad el mejor vestido, y vestidle; y poned un anillo en su mano, y calzado en sus pies. Y traed el becerro gordo y matadlo, y comamos y hagamos fiesta; porque este mi hijo muerto era, y ha revivido; se había perdido, y es hallado. Y comenzaron a regocijarse”.

Las limitaciones del idioma a veces disminuyen nuestra comprensión de los conceptos de las Sagradas Escrituras. Por ejemplo, solo hay una palabra para amor en español, pero el Nuevo Testamento usa dos palabras griegas diferentes. Una de ellas, fileo, se refiere al cuidado y afecto fraternal, pero el término más poderoso ágape significa un compromiso sacrificial con el bienestar, la seguridad y el desarrollo de los demás. Esta es la clase de amor que Dios siente por nosotros, y que el Espíritu Santo produce en los creyentes y por medio de ellos.

Tal vez la mejor manera de entender el amor ágape es ver cómo es. En su parábola del hijo pródigo, Jesús se refiere al amor sacrificial de un padre por su hijo descarriado. Cuando el joven exigió su herencia de manera prematura, el padre no se negó a su petición, aunque sabía que lo llevaría solamente a la amargura. Entonces, a pesar del sacrificio personal y financiero, dio a su hijo su parte. Después, el padre esperó con paciencia mientras el hijo pródigo aprendía una lección difícil.

Sin duda, ese fue un tiempo difícil para el padre, porque un buen padre quiere proteger a sus hijos de los errores y de sus consecuencias. Pero un hombre sabio también sabe que algunas verdades difíciles deben aprenderse por medio de una experiencia dolorosa. A veces, lo mejor que podemos hacer es confiar en que el Señor tocará los corazones rebeldes.

Pero el amor ágape no solo deja ir; también perdona y restaura. Cuando el hijo pródigo regresó a casa, humilde y contrito, su padre corrió hasta él para recibirlo y restituir su lugar en la familia; lo mismo hace el Padre celestial por nosotros.
(De Encontacto)

martes, 13 de febrero de 2018

”Tu palabra sabia de hoy”

Miércoles 14.2.18

Juan 15:12-15 “Este es mi mandamiento: Que se amen unos a otros, como yo los he amado.  Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos. Ustedes son mis amigos, si hacen lo que yo les mando. Ya no les llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero les he llamado amigos,...”.

Cuando nos amamos como nos ordena Jesucristo:
Perdonamos: Porque sabemos que el que perdona el pecado, busca afecto; más el que lo divulga, aleja al amigo (Prov.17:9).

Amamos, aún en tiempo de angustia: Porque vemos a los otros como a  hermanos (Prov.17:17). Y hay amigos que son más que hermanos (Prov.18:24).

Nos respetamos: Y mostramos delicadeza hacia los demás. (Rom.12:10)

Cero chismes: Porque sabemos que el chismoso aparta a los mejores amigos. (Prov.16:28).

Nos dejamos aconsejar: Porque los consejos de los amigos alegran el alma (Prov. 27:9).

Vivimos en armonía: Porque es bueno y agradable, que los hermanos convivamos en armonía! (Salmos 133.3)

Vivimos confiados: Porque sabemos que si caemos nos levantarán, ya que dos son mejor que uno,... Y si uno se tropieza, el otro lo levanta. (Ecles.4:9-10)

Si el amor de Dios está en ti, sabes lo que es amar; porque el verdadero amor viene de Dios; y si realmente amas, es porque has nacido de Dios y le conoces (1 Jn.4:7).

¡Feliz día del amor y la amistad para los lectores y oyentes de “Tu palabra sabia de hoy”!

¡Que Dios te bendiga!😘💝🌹💐🌈🌻

Wilda M.V.

”Tu palabra sabia de hoy”

Martes 13.02.18

Marcos 13:9-10Pero miren ustedes mismos; porque les entregarán a los concilios, y en las sinagogas les azotarán; y delante de gobernadores y de reyes les llevarán por causa de mí, para testimonio a ellos. Y es necesario que el evangelio sea predicado antes a todas las naciones”. Amén.
Una anécdota acerca de un ciego y su linterna dice así: Un ciego sentado en una esquina de la ciudad, tenía una linterna encendida a su lado. Un curioso le preguntó: ¿para qué llevas la linterna?  El ciego contestó: para que sepan que estoy aquí, para que nadie tropiece conmigo, y para que nadie se caiga.
La Biblia es algo parecido. Ella es:
1) luz que ilumina a los que andan en tinieblas.
2) Un canal que te da Dirección hacia Dios.
3) un instrumento eficaz para que nadie caiga.

Al leerla, meditarla y aplicarla, rescatarás a tu alma, y serás testimonio del Evangelio para los demás.
Por más sermones que compartas, si no predicas a Cristo y a Su Evangelio con tus acciones y actitudes de vida, siempre serás tropezadero para aquellos que andan errantes y en oscuridad.
Trata de que cuando mencionen tu nombre, se oiga decir: ahí si que hay testimonio fiel a Cristo, llenura del Espíritu Santo, y  sabiduría; se le puede  encargar cualquier trabajo.
Que tu manera santa de andar, sea esa luz que llevará a otros a Cristo. Y que tu espíritu testifique a los demás que realmente eres hijo aprobado de Dios.

Nunca te avergüences de mostrar testimonio de Cristo; y de sentirte orgulloso de llevar la lámpara del Evangelio, para no dejar que otros tropiezen y caigan.
¡Que Dios te bendiga, y te ayude a iluminar a otros con ese farol que guía a vida eterna!
Wilda M.V.

(TPSH 23.12.22)


lunes, 12 de febrero de 2018

“Aliento en todo tiempo”


Meditación 12.02.18

Salmos 62.5-8Alma mía, en Dios solamente reposa, porque de él es mi esperanza. El solamente es mi roca y mi salvación. Es mi refugio, no resbalaré.  En Dios está mi salvación y mi gloria; en Dios está mi roca fuerte, y mi refugio. Esperad en él en todo tiempo, oh pueblos; derramad delante de él vuestro corazón; Dios es nuestro refugio”.

Quizá no tengas suficiente dinero en el banco para pagar las cuentas, haya muerto un ser querido, o tu familia enfrente tiempos difíciles. En momentos dolorosos, muchos creyentes acuden a la Biblia en busca de consuelo y dirección. En sus páginas, encontramos la seguridad que nos alienta en todo tiempo de la vida. “El gran amor del Señor nunca se acaba, y su compasión jamás se agota. Cada mañana se renuevan sus bondades; ¡muy grande es su fidelidad!” (Lamentac 3.22, 23 NVI).

Dios es fiel. En otras palabras, podemos contar con que Él será y hará justo lo que dice. Por ejemplo, la Biblia nos asegura que el Señor es digno de confianza, amoroso e incapaz de fallar (Salmos 37.5; Romanos 5.8; Josue 1.5). Por el gran amor que nos tiene, usará cualquier aspecto de su naturaleza multifacética para darnos lo que Él sabe que necesitamos. Él es nuestro Salvador, Consolador y Disciplinador, que nos guía en medio de los cambios y desafíos de la vida.

Sin importar las dificultades que enfrentemos, podemos confiar en Dios porque Él conoce todas las cosas. Está consciente de la duración e intensidad de nuestra situación, y utiliza su conocimiento para ayudarnos y protegernos. Además, el Señor es todopoderoso, lo que significa que puede satisfacer cada necesidad y cambiar las circunstancias de acuerdo con su plan. Nuestro Padre está en todas partes, incluso a nuestro lado en lo que sea que enfrentemos. Él promete: “Nunca te dejaré, jamás te abandonaré” (Hebreos 13.5 NVI).

Las dificultades pueden llevarnos a cuestionar la fiabilidad de Dios. Pero si ponemos nuestra confianza en nuestro Padre omnisciente y omnipotente, podemos comenzar cada mañana con una nueva sensación de su fidelidad que nos acompañará todo el día.
(De Encontacto)



domingo, 11 de febrero de 2018

"Tu palabra sabia de hoy"

Lunes 12.2.18

Juan 10:25-28 "Jesús les respondió: se lo he dicho, y no creen; las obras que yo hago en nombre de mi Padre, ellas dan testimonio de mí; pero no creen, porque no son de mis ovejas, como les he dicho. Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano".

Alguien contaba que tenia problemas para oír, por eso usaba audífonos. Esos aparatitos normalmente funcionan bien, excepto en lugares con mucho ruido. Ahí se captan todas las voces, y no se puede escuchar a la persona delante. Así sucede en la vida cotidiana. Hay tantos ruidos y sonidos que ahogan la voz suave de Dios.

Felizmente, sus audífonos tienen un ajuste que elimina los sonidos circundantes y le permite oír las voces que quiere escuchar. Del mismo modo, a pesar de las voces que nos rodean, si aquietamos nuestras almas y prestamos atención, escucharemos el «silbo apacible y delicado» de Dios (1 Reyes 19:11-12).

Dios nos habla todos los días, nos  llama en las inquietudes y anhelos; en las tristezas más profundas, y en el vacío y la insatisfacción de nuestras mayores alegrías. Pero, fundamentalmente, nos habla mediante su Palabra (1 Tesalonicenses 2:13).

Cuando tomes Su libro y lo leas, también escucharás su voz! El Señor te ama más de lo que crees, y desea que escuches lo que te quiere decir.

Si dedicas tiempo a escucharle, Dios te  hablará. Especialmante a través de su Palabra. Si quieres que Dios te hable mucho, abre la Biblia mucho!

Bendecido inicio de semana, y que Dios te hable!

Wilda M.V.

(Referencia: Nuestro pan diario)

"Tu palabra sabia de hoy"

Domingo 11.2.18

Marcos 10:23-25 "Entonces Jesús, mirando alrededor, dijo a sus discípulos: ¡Cuán difícilmente entrarán en el reino de Dios los que tienen riquezas! Los discípulos se asombraron de sus palabras; pero Jesús, respondiendo, volvió a decirles: Hijos, ¡cuán difícil les es entrar en el reino de Dios, a los que confían en las riquezas! Más fácil es pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios".

Él mismo Jesús lo dijo: ¡Qué difícil es para los ricos entrar en el reino de Dios!  Con razón los discípulos se asombraron de lo dicho. Jesús no estaba hablando del que tiene muchos bienes, sino de aquel que lo único que sabe es tener bienes 🤔

Pero y qué ejemplo les puso: es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que un rico entrar en el reino de Dios. Ahí si que los discípulos se "tostaron".😱 (Imagino que ellos decían: Oh, pero bueno, y entonces, ¿quién se salvará? -Cuán faltos de discernimiento estaban!

Jesús lo que les quería dar a entender es que donde está el  tesoro guardado, está el corazón, y que si solo se sabe hacer y afanarse por riquezas terrenales, sin  detenerse a pensar que hay un alma que NO es con lo de aquí que vivirá...están fritos.

Por más que nos afanemos como seres humanos, y nos creamos que Dios No pinta en la ecuación de la vida, te recuerdo que solo una parte limitada puedes manejar tú; y que sin Dios es imposible vivir en paz aquí, y mucho menos escalar al más allá junto a Él.

Los versos 28-30 nos dan la gran promesa de que los que nos desarraigamos de las cosas de aquí, echamos lo terrenal de lado y seguimos a Jesús y el evangelio;  "dejamos casa, hermanos, padres, hijos o posesiones" recibiremos 100 veces más ahora en este tiempo, y en la edad venidera, la vida eterna. ALELUYA!!!

Que tu mirada no sea depositada en las riquezas que este mundo ofrece, sino en Dios, y un alma con vida eterna!

Feliz domingo!😇🌈🌻🌟🌹

Wilda M.V.

sábado, 10 de febrero de 2018

"Tu palabra sabia de hoy"

Sábado 10.2.18

Salmos 121 "Alzaré mis ojos a los montes;  ¿De dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene de Jehová, Que hizo los cielos y la tierra. No dará tu pie al resbaladero, Ni se dormirá el que te guarda. He aquí, no se adormecerá ni dormirá El que guarda a Israel. Jehová es tu guardador; Jehová es tu sombra a tu mano derecha. El sol no te fatigará de día, Ni la luna de noche. Jehová te guardará de todo mal; El guardará tu alma. Jehová guardará tu salida y tu entrada Desde ahora y para siempre".

El salmista comienza con una confesión personal de fe en el Señor, quien era su fuente de ayuda. ¿Qué implicaba esto? Estabilidad, cuidado constante, presencia permanente, y protección de toda clase de mal, ahora y por siempre.

A través de los tiempos, el pueblo de Dios ha escrito canciones que identifican al Señor como su fuente de «ayuda». Es maravilloso elevar nuestra voz para entonar canciones que reflejan el sentir de Charles Wesley: «Padre, extiendo mis manos a ti, la única ayuda que conozco»; o las palabras certeras de Martín Lutero: «Castillo fuerte es nuestro Dios».

¿Te sientes solo, abandonado, confundido? Medita en las palabras de  Salmos 121, y permite que llenen tu alma de fe y valor. Tú no estás solo, así que no trates de vivir aislado y dependiendo de tus fuerzas.

Regocíjate en el cuidado de Dios, para  lo terrenal, como para lo  eterno. Cualesquiera  que sean los próximos pasos que tengas que tomar, tómalos con Su ayuda. Recuérdalo hoy.

¡El Hacedor del universo es tu ayuda y te bendice. Feliz sábado!

Wilda M.V.
(Referencia: Nuestro pan diario)

viernes, 9 de febrero de 2018

“La respuesta a la oración: Nuestra garantía”  


Meditación 09.02.18

Juan 16.23-27En aquel día no me preguntarán nada. De cierto, de cierto les digo, que todo cuanto pidieran al Padre en mi nombre, se lo dará. Hasta ahora nada han pedido en mi nombre; pidan, y recibirán, para que su gozo sea cumplido. Estas cosas les he hablado en alegorías; la hora viene cuando ya no les hablaré por alegorías, sino que claramente les anunciaré acerca del Padre. En aquel día pedirán en mi nombre; y no les digo que yo rogaré al Padre por ustedes, pues el Padre mismo les ama, porque ustedes me han amado, y han creído que yo salí de Dios”.

¿Estás seguro de que el Señor escuchará y responderá tus oraciones? Uno de los motivos por el que puedes llegar a luchar con la duda es el desconocimiento de lo que Dios ha hecho para que podamos venir delante de Él con nuestras peticiones.

Asociación. Nuestro pecado nos separó de Dios, pero Cristo entregó su vida en la cruz como pago por la condena que merecíamos por el pecado. En el momento que fuimos salvos, entramos en una asociación íntima con Dios-Padre por medio de su Hijo.

Acceso. Junto con nuestra nueva relación viene el acceso al trono de la gracia, donde podemos llevar con valor y confianza nuestras preocupaciones a Dios.

Autoridad. En los Evangelios, las oraciones del Señor Jesucristo iban acompañadas del poder de su condición divina. Ahora, por nuestra asociación con Él por medio de la salvación, Jesucristo nos ha dado el privilegio de orar en su nombre conforme a su poder y autoridad.

Acuerdo. Pero la oración ofrecida en el nombre de Jesús siempre debe estar de acuerdo con lo que Él pediría. En otras palabras, nuestras peticiones deben alinearse con el carácter de Dios y el contenido de su Palabra. 

Garantía. Cuando el Señor dijo a sus discípulos que respondería a las peticiones ofrecidas en su nombre, estaba afirmando que podemos orar con seguridad gracias a nuestra asociación y acuerdo con Él.

Cuando no estemos seguros de si nuestras peticiones están de acuerdo con lo que Jesús pediría, podemos sentirnos reconfortados al saber que Cristo está sentado a la diestra del Padre, intercediendo siempre por nosotros conforme a la voluntad del Padre celestial.
(De Encontacto)

16/9/25... Por El Bien De Otros

Filipenses 2.3-4 “ Nada  hagan  por contienda  o  vanagloria; antes bien  con  humildad ,  estimando,  cada  uno a  los demás,  como superio...