jueves, 16 de noviembre de 2017

”Tu palabra sabia de hoy”

Hageo 1:5-7  “Pues así ha dicho Jehová de los ejércitos: Mediten bien sobre sus caminos. Siembran mucho, y recogen poco; comen y no se sacian; beben, y no quedan satisfechos; se visten, y no se calientan; y el que trabaja a jornal recibe su jornal en saco roto. Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Mediten sobre sus caminos”.

Dios envió este mensaje a través del profeta Hageo, ya que el pueblo luchaba y luchaba y apenas veía progreso.  Causa: no estaban haciendo lo bueno a los ojos del Señor. Prestaron más atención a sus asuntos, que a los de Dios.

En el momento en que se presta más atención a la creación que al Creador, habrá problemas. Se sembrará mucho, y se recogerá poco.

El Señor hoy da el mismo mensaje, para que consideremos nuestros caminos.

¿Tenemos en cuenta al Señor cuando recibimos nuestro salario para ofrendar o diezmar?

¿Lo tenemos presente al hablar, y al mostrar nuestro estilo de vida?

Cuando consideremos nuestro camino, y cuestionemos nuestro estilo de vida (de cara a Dios), podremos escucharlo cuando nos hable.

Al decidir alinearnos,  con lo que sabemos de la Palabra de Dios, veremos el fruto de nuestro arduo trabajo, nuestras energías y nuestros impulsos serán renovados,  porque invertiremos más en las cosas que son eternas, que en las temporales.

Considerar tu camino es reflejar la gracia y misericordia de Dios. Y tener disposición a equilibrar espíritu, alma y cuerpo.

Dios anhela bendecirnos más; la clave es ponerlo a Él y a Su palabra delante. Es meditar en nuestros caminos, y tomar las medidas necesarias.

Que hoy comprendas que los caminos del Señor, están por encima de los tuyos, y te bendiga!

Wilda M.V.
(Referencia: devocionales cristianos org)

miércoles, 15 de noviembre de 2017

“El buen uso del tiempo”  


Meditación 15.11.17

Te invito a que te pongas en contacto con la lectura bíblica que avala esta meditación en Mateo 25.14-28.  Ahí podrás ver la parábola de los talentos, la cual pone de manifiesto cómo es el reino de los cielos, qué hacer y que no hacer con lo que Dios nos ha dado.

Como dicen esos pasajes de hoy, el Señor nos da capacidades y recursos, y desea que los usemos bien. Uno de estos regalos es el tiempo.

Para manejar bien nuestros días, debemos revisar el día que acabamos de vivir: ¿Qué actividades elegimos? ¿Cuánto tiempo tomó cada una? ¿Cuáles fueron los resultados? Esta disciplina revelará qué es lo más importante para nosotros.

Al mirar de cerca nuestras evaluaciones, podemos determinar lo que guía nuestras decisiones en cuanto al uso del tiempo. Algunas personas reaccionan, la mayor parte del día, a las circunstancias. Saltan de una cosa a otra, respondiendo llamadas telefónicas, reorganizando estantes, o haciendo cosas que se les presenten en el momento. Pero este estilo de vida no es bueno.

Otras personas usan su tiempo de acuerdo a sus deseos. Quieren relajarse, por lo que al llegar a casa se dedican a ver televisión, o a disfrutar de un pasatiempo. Tales deseos no son malos, pero no deben guiar la mayor parte de nuestras acciones.

Felizmente, también hay personas que viven de acuerdo con lo que consideran importante. Amar a Dios y servir a los demás, son ejemplos de valores bíblicos que deben determinar lo que hagamos con nuestro tiempo.

Si usted hace una lista de sus actividades y calcula el tiempo que le dedica a cada una durante la semana, se sorprenderá al ver cuáles tienen más peso.
Cada momento es un regalo; por tanto, aparte unos minutos cada noche para planificar. Después, reexamine la manera cómo utilizó las últimas 24 horas. Esto le ayudará a vivir con propósito.
(De Encontacto.org)

martes, 14 de noviembre de 2017

*'Tú palabra sabia de hoy"*

Salmos 19:7-11 "La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. Los mandamientos de Jehová son rectos, que alegran el corazón; El precepto de Jehová es puro, que alumbra los ojos. El temor de Jehová es limpio, que permanece para siempre; los juicios de Jehová son verdad, todos justos. Deseables son más que el oro, y más que mucho oro afinado;Y dulces más que miel, y que la que destila del panal. Tu siervo es además amonestado con ellos; en guardarlos hay grande galardón".


Estás seguro que la Ley del Señor Dios Todopoderoso es perfecta? Hoy es día perfecto para asegurarte de creerlo!


Esa Ley no es de humanos, no se corrompe, no se soborna, pero si te infunde nuevo aliento.


Aprendamos, dejemos de resistirnos a los  mandatos del Señor, Él es digno de toda confianza, y quien nos da sabiduría, aunque seamos poco estudiados, experimentados o  sencillos.


Todos los preceptos que Dios ha dejado establecidos son rectos en gran manera, nos dan paz y regocijo sin igual.


Mediante esas palabras,  el Señor puede abrir nuestros ojos, y traernos de las tinieblas a la luz admirable. Mediante el conocimiento de la Palabra de Dios, aprendemos a honrarle y, con temor reverente, a obedecerle.


Y como Dios es justo, y su justicia es la única verdadera, si le rechazamos, Su sentencia, tarde o temprano llegará... El tesoro que se encuentra escondido en esas palabras, debería ser, para todo ser humano pensante, y con dos dedos de frente, más deseable que el oro fino.


Es palabra sabrosa y dulce más que la miel; quien no decide saborearla, queda advertido, y con conocimiento de que quienes si lo hagan,  recibirán grande y gloriosa recompensa!


Feliz día, y que Dios abra tu entendimiento,  para que nunca rechaces o ignores esas gloriosas palabras!


Wilda M.V.


“Tiempo para el éxito”


Meditación 14.11.17

Efesios 5.15-17  “Miren, con diligencia cómo andan, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. Por tanto, no sean insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor”.

Cada noche antes de ir a dormir, escribo mis metas para el día siguiente. Al despertar, leo la lista para centrar mi atención en lo más importante. Si esto no fuera parte de mi rutina diaria, las pocas horas de que dispongo no serían productivas.

La Biblia nos enseña a usar nuestros días con sabiduría. El tiempo es un regalo. El Todopoderoso ha dado a cada persona un número de días para vivir. Pero nuestra vida es fugaz e incierta; Santiago la compara con neblina “que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece” (Santiago 4.14). El tiempo es también irreversible; no se puede tocar una tecla de “rebobinar” y devolver el tiempo.

Es absurdo desperdiciar este precioso recurso, pero muchas veces lo hacemos. Esté alerta para que pueda vivir a plenitud cada momento de su vida.

Las prioridades fuera de lugar dan como resultado oportunidades desperdiciadas. Nuestros valores determinarán el énfasis y la cantidad de tiempo que demos a cada actividad.

La retrasar cosas y el perfeccionismo absorben un tiempo valioso que podría haber sido utilizado para beneficio del Reino de Dios.
La falta de concentración quita su potencial al tiempo. Por ejemplo, tenemos que disciplinarnos para concentrarnos en la lectura de la Palabra de Dios, y no desviarnos.

¿Qué valores guían su manera de utilizar su tiempo? ¿Hay algo que le impida vivir cada momento de una manera que agrada al Señor? Usted nunca tendrá la oportunidad de vivir el hoy otra vez. Por tanto, pida a Dios guía y dirección para que pueda vivir cada día con propósito.
(Encontacto.org)

lunes, 13 de noviembre de 2017

"Tú palabra sabia de hoy"

14.11.17

Lucas. 1:5-7, 11-15 "Hubo en los días de Herodes, rey de Judea, un sacerdote llamado Zacarías,... su mujer ... se llamaba Elisabet. Ambos eran justos delante de Dios, y andaban irreprensibles en todos los mandamientos y ordenanzas del Señor. Pero no tenían hijo, porque Elisabet era estéril, y ambos eran ya de edad avanzada. Y se le apareció un ángel del Señor puesto en pie a la derecha del altar del incienso. Y se turbó Zacarías al verle, y le sobrecogió temor. Pero el ángel le dijo: Zacarías, no temas; porque tu oración ha sido oída, y tu mujer Elisabet te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Juan. Y tendrás gozo y alegría, y muchos se regocijarán de su nacimiento; porque será grande delante de Dios...".

Con frecuencia Dios se toma su tiempo para responder nuestras oraciones. Y  nos cuesta entenderlo.

Esa era la situación de Zacarías, un sacerdote a quien se le apareció el ángel Gabriel y le dijo: «Zacarías, no temas; porque tu oración ha sido oída, y tu mujer Elisabet te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Juan» (vs.13).

A Zacarías le costaba creer el mensaje del ángel, de que ahora era que su esposa iba a tener hijos. Dios, en su tiempo, respondió la oración!

La memoria de Dios jamás olvida nuestras oraciones, y tal vez responda mucho después de que le presentemos nuestras peticiones.

A veces, el Señor responde «no», y otras, «espera», pero su respuesta siempre está acompañada de amor. Los caminos de Dios superan los nuestros, y siempre podemos confiar en que son buenos.

Eso fue lo que descubrió Zacarías. Pidió un hijo, pero Dios le dio aun más. Su hijo Juan se transformaría en el profeta que anunciaría la llegada del Mesías.

La experiencia de Zacarías demuestra una verdad vital que debería animarnos al orar: los tiempos de Dios rara vez son los nuestros, pero siempre vale la pena esperarlos.

Demos gracias a Dios porque puede tomar nuestras oraciones, y hacer mucho más de lo que podamos  imaginar!

Dios te escuche y te bendiga en este día!🌟

Wilda M.V.
(Referencia: Nuestro pan diario)

“Las tres respuestas de Dios a la oración”

Meditación 13.11.17

Mateo 7.7-11  “Pidan y se les dará; busquen, y hallarán; llamen, y se les abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá. ¿Qué hombre hay de ustedes, que si su hijo le pide pan, le dará una piedra? ¿O si le pide un pescado, le dará una serpiente?. Pues si ustedes, siendo malos, saben dar buenas dádivas a sus hijos, ¿cuánto más su Padre que está en los cielos dará buenas cosas a los que le pidan?”.

Muchas veces, los creyentes ven al Todopoderoso como un gran Santa Claus en el cielo: pensamos en nuestras oraciones, no como peticiones, sino como exigencias. Si Dios no nos da lo que le pedimos, tenemos entonces una crisis de fe, creyendo que Él ya no nos responde. El problema está en que no entendemos bien las tres respuestas que da Dios a la oración:

Sí. ¡Nos encanta esta respuesta! No hay nada tan estimulante o que inspire más la fe que el ver cómo el Señor mueve montañas para darnos lo que una vez veíamos como imposible.

No. Aquí es donde comienzan nuestros problemas. Pero tenemos que aceptar el hecho de que Dios también responde “no” a nuestras preguntas. No porque Él sea avaro o indiferente, sino todo lo contrario. Él es generoso, amoroso, y se preocupa por sus hijos. Mateo 7.11 no dice que Dios dará “todo a quienes le pidan”, ¿verdad? No. Dice que el Padre celestial dará lo que sea bueno para aquellos que le pidan. Muchas veces, dar “cosas buenas” significa que Dios nos niegue lo que Él sabe que no es bueno para nosotros.

Espera. Esta respuesta puede ser aún más dura que un “no” directo. Lo que sucede es que algunas cosas que pueden ser buenas, no son buenas para nosotros hoy. Recuerde que Dios es eterno; Él siempre lo ve todo. Por eso, si Él considera que la bendición de mañana no es una bendición hoy, nos la negará por un tiempo, hasta que estemos preparados para recibirla.

Hermano, no reaccione equivocadamente si la respuesta de Dios no es la que usted esperaba. ¡Por el contrario, alabe al Señor por responder sus peticiones de la mejor manera para su vida!

(Encontacto.org)

"Tú palabra sabia de hoy"

"¿Es la Biblia la Palabra de Dios?"

Lo creas o no... Si, la Biblia es la Palabra de Dios!  Apréciala, estúdiala, obedécela y confia en ella. Rechazarla es rechazar a Dios mismo.

Aunque la revelación de Dios fue dada por unos 1500 años, contiene todo lo que se necesita para conocer a Dios, a fin de tener una correcta relación con Él. La Biblia es la última autoridad para todos los asuntos de fe, práctica religiosa y moral.

2ª Timoteo 3:16-17 dice: “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra”.

La Biblia es la Palabra de Dios, y muestra de ello es su unidad. Son 66 libros individuales, escritos en 3 continentes, en 3 idiomas, por más de 40 autores, pero permanece como un libro unificado de principio a fin, y sin contradicciones. Dios movió a todos esos hombres a  registrar Sus palabras.

Contiene cientos de profecías referentes al futuro de naciones particulares incluyendo Israel, al futuro de ciertas ciudades, al futuro de la humanidad, y a la venida de Uno que sería el Mesías, el Salvador de no solamente Israel, sino de todo el que creyera en El.

No habría camino lógico para explicar las profecías cumplidas, sino por origen divino. No hay otro libro religioso con el alcance que tiene la Biblia.

Tiene autoridad única. Millones de vidas han sido transformadas (yo una de ellas!).

Una evidencia externa a la Biblia es su historicidad, ya que detalla eventos con veracidad y precisión verificables. Es el mejor libro documentado del mundo antiguo y del mundo futuro.

Los que la escribieron conocían la verdad de su mensaje, y sus  transformaciones fueron admirables. Tanto así que estuvieron dispuestos a morir por el mensaje que, de amor, transformación y poder, Dios les había revelado.

La Biblia ha sufrido ataques agresivos e intentos de destruirla, mas que cualquier otro libro en la historia, pero ha resistido y sobrevivido a todos sus agresores, y todavía es el libro más publicado en el mundo, aunque muchos la sigan considerando como mitológica. Sus conceptos morales y legales, y enseñanzas, han tenido, y seguirán teniendo, una influencia positiva en todo el mundo.

Por mucho que sus oponentes traten de atacar, destruir o desacreditarla, la Biblia permanece tan fuerte, tan real, y tan relevante como lo fue antes. Jesús dijo: “El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán” (Marcos 13:31).

Feliz, bendecido y edificante lunes😇!

Wilda M.V.
(Referencia: Got Questions Ministries)

domingo, 12 de noviembre de 2017

"Tú palabra sabia de hoy"

Salmos 141:3,4,8,9  "Pon guarda a mi boca, oh Jehová; guarda la puerta de mis labios. No dejes que se incline mi corazón a cosa mala, a hacer obras impías con los que hacen iniquidad; y no coma yo de sus deleites. Por tanto, a ti, oh Jehová, Señor, miran mis ojos; en ti he confiado; no desampares mi alma. Guárdame de los lazos que me han tendido, y de las trampas de los que hacen iniquidad".

Muchos, ante cosas que no les gustan, o situaciones de impotencia, se enojan y se ven tentados a explotar.

La recomendación es orar, como hizo David: «Pon guarda a mi boca, oh Señor; guarda la puerta de mis labios" (vs 3).

De gran ayuda es: Pensar antes de hablar. ¿Son tus palabras buenas,  útiles, cordiales y agradables? Efesios 4:29 expresa que: "Ninguna palabra corrompida salga de tu boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes. Y el vs.31: "Quítense de toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia".

Para poner guarda a la boca, es necesario mantenerla cerrada, cuando nos irritemos o tengamos impotencia; y buscar la ayuda del Señor, a fin de decir las palabras correctas,  con el tono adecuado,  o para callar.

Nadie merece que tú, pese a la circunstancia que sea, maltrates verbalmente a nadie... Eso es  inaceptable.

Controlar las palabras es una labor de toda la vida. Gracias a Dios, si le buscamos, Él nos ayuda y produce en nosotros el querer como el hacer (Filip. 2:13).

Excelente día para decirle al Señor:  Ayúdame a pensar antes de hablar.

«Panal de miel son los dichos suaves…». (Prov. 16:24).

Feliz Domingo y que Dios te bendiga!

Wilda M.V.
(Referencia: Nuestro pan diario)

sábado, 11 de noviembre de 2017

"Tú palabra sabia de hoy"

Sábado 11.10.17

2 Corintios 1:3-6 "Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación, el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios. Porque de la manera que abundan en nosotros las aflicciones de Cristo, así abunda también por el mismo Cristo nuestra consolación.

Pero si somos atribulados, es para vuestra consolación y salvación; o si somos consolados, es para vuestra consolación y salvación, la cual se opera en el sufrir las mismas aflicciones que nosotros también padecemos...".

Se cuenta que un paciente, después de una cirugía a corazón abierto, tuvo una reacción alérgica; al despertar empezó a sacudirse con violencia, en un intento de zafarse de lo que le sostenía. Fue un episodio doloroso. Una enfermera se acercó y simplemente le sostuvo la mano.  Ese gesto hizo la diferencia, empezó un proceso de relajación y dejó de temblar.

Una mano de consuelo puede servir de mucho. Dios usa el consuelo cuando sus hijos sufren. Es un recurso poderoso y memorable para cualquiera que cuide a otro. Pablo afirma que es una importante herramienta de Dios.

Y no solo eso, sino que Dios también multiplica el impacto de ese simple consuelo. Es otra señal de su gran amor!

Demos gracias al Padre, por utilizar cosas tan simples para consolar.

Gestos sencillos pueden brindar un consuelo inmenso.

!Dios te consuele y te bendiga hoy!

Wilda M.V.
(Referencia: Nuestro pan diario)

viernes, 10 de noviembre de 2017

”Tu palabra sabia de hoy”

Viernes 10.11.17

Juan 11:32-35  “Cuando María llegó donde estaba Jesús y lo vio, se arrojó a sus pies y le dijo: Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto. Al ver llorar a María y a los judíos que la habían acompañado, Jesús se turbó y se conmovió profundamente. -¿Dónde lo han puesto? -preguntó. -Ven a verlo, Señor -le respondieron. Jesús lloró”.

Lázaro había muerto. María le dijo a Jesús: “si hubieses estado aquí…”.  Fue incrédula de que aún se podía ver el milagro. Ante la adversidad y dolor humano, la fe flaquea.

Todos lloraban, hasta Jesús lloró. Hay veces que las crisis familiares sacan lágrimas, pero lo más importante es que Jesús esté presente, y donde Él está, todo se transforma. “Si lo crees verás la gloria de Dios” (Jn.11:40).

Dios requiere de sus hijos fe. Aunque los tiempos sean difíciles, es necesario continuar creyéndole a Dios! La adversidad es el momento de poner en práctica las enseñanzas recibidas de la Palabra de Dios.

Para Dios todo es posible. Jesús clamó: “Lázaro, ven fuera”. Y el que estaba muerto salió; aún atadas las manos, los pies con vendas, y el rostro envuelto en un sudario.

Hubo varios obstáculos que superar: 
a) Lázaro había muerto hacía 4 días. Algo difícil de reversar. pero Jesucristo es el dador de vida. 

b) El sepulcro tenía gran piedra. Pero Jesús tiene poder sobre todo lo creado. 

c) Las hermanas de Lázaro fueron incrédulas. Pero Jesús creía por ellas.

d) Lázaro, a pesar de estar como estaba, Jesús lo llamó y él obedeció… El Dios Todopoderoso lo levantó. 

El nombre “Lázaro” significa: Ayudado por Dios, o ayuda de Dios. *Cuando todos lloraban… Jesucristo se glorificó. Cuando nada se podía hacer por Lázaro, Dios mismo le ayudó a salir del sepulcro*.

No importa lo que estás pasando, Dios es tu perfecta ayuda, dale a él la carga, y él estará de tu lado. Jesús restauró esa familia, también lo hará con la tuya. Solo cree y verás su gloria!

¿Qué obstáculos tienes delante? ¿Qué piedra te impide avanzar?
¿Qué ataduras oprimen tu corazón? Jesucristo ha venido a traerte vida y vida en abundancia. Si crees, verás la gloria de Dios!

Feliz viernes y que Dios te dirija y bendiga!

Wilda M.V.
(Referencia: Mensajes y sermones para predicar)

jueves, 9 de noviembre de 2017

“¿Quién controla nuestros pensamientos?” 


Meditación 09.11.17
Colosenses 3.1-3Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra. Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios”.
¿Alguna vez ha luchado usted con pensamientos que sabe que no debería tener? Tal vez, a veces, permiten que su mente se desvíe hacia el resentimiento, el orgullo, los deseos pecaminosos o la ira, actitudes y sentimientos que usted sabe que no son buenos. ¿Cómo tiende a responder cuando eso sucede?
Vivimos en un tiempo y una cultura que continuamente bombardean nuestra mente con información, por medio de programas de radio y televisión, películas, periódicos e Internet. A veces, el mensaje es bueno, pero a menudo no lo es. Y la verdad es que nuestro pensamiento nos afecta más de lo que podemos darnos cuenta, moldeándonos en lo que nos estamos convirtiendo. Los pensamientos tienen como fruto las acciones; las acciones, los hábitos; los hábitos, el carácter; y nuestro carácter, nuestro destino.
En la lectura de hoy, el apóstol Pablo insta a los creyentes a “seguir buscando”. En otras palabras, necesitamos buscar a Cristo y continuamente fijar nuestra mente en las cosas de arriba. La Biblia nos asegura que podemos controlar los pensamientos confiando en el Señor (vea 2 Corintios 10.5) Si buscamos la ayuda de Dios en nuestra manera de pensar, Él moldeará nuestro corazón, y cambiará nuestra atención de cosas materiales e impías, a valores más saludables y espirituales (Filipenses 4.8).
En el momento que depositamos nuestra fe en Jesús, nos convertimos en personas nuevas. En esto se basa la capacidad de pensar correctamente (es decir, de pensar más como Cristo) y, por tanto, de tomar decisiones sabias en la vida. Esto no significa que siempre tendremos pensamientos rectos, pero sí el poder por el Espíritu Santo de dirigir nuestra mente en la dirección celestial.

(Encontacto.org)

"Tú palabra sabia de hoy"

Jueves 9.11.17


Salmos 119:97-106 "¡Oh, cuánto amo yo tu ley! Todo el día es ella mi meditación. Me has hecho más sabio que mis enemigos con tus mandamientos, porque siempre están conmigo.
Más que todos mis enseñadores he entendido, porque tus testimonios son mi meditación.
Más que los viejos he entendido, porque he guardado tus mandamientos; de todo mal camino contuve mis pies, para guardar tu palabra.
No me aparté de tus juicios, porque tú me enseñaste. ¡Cuán dulces son a mi paladar tus palabras! Más que la miel a mi boca.
De tus mandamientos he adquirido inteligencia; por tanto, he aborrecido todo camino de mentira.
Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino.
Juré y ratifiqué que guardaré tus justos juicios".


Uno de los primeros pasos para conocer los misterios, o verdades no entendidos de la Biblia, es empezar a leerla. Y luego de leerla, comprometerte a obedecerla.


Este capítulo de Salmos, está lleno de expresiones para experimentar a diario. Cuán poderosa es la Palabra de Dios, por lo que el salmista manifiesta: «¡Oh, cuánto amo yo tu ley! Todo el día es ella mi meditación» (v.97).


Una búsqueda firme y entusiasta te lleva a crecer en sabiduría y obediencia al Señor.


La Biblia no es el  contenido de una fórmula mágica, es mucho más; es un sinfin de respuestas para tus dudas...por eso deberías leerla.


Y aunque algunos pasajes te sigan resultando desconcertantes, ve aferrándote a las verdades que ya has entendido. Agradece a Dios por la Biblia, un instructivo al cual no le faltó ninguna información.


Leer y obedecer la Palabra de Dios  permite descubrir el amor y poder de Dios y de Jesucristo.


Dios te dirija a través de la Biblia, y te bendiga!📖


Wilda M.V.
(Referencia: Nuestro pan diario)

16/9/25... Por El Bien De Otros

Filipenses 2.3-4 “ Nada  hagan  por contienda  o  vanagloria; antes bien  con  humildad ,  estimando,  cada  uno a  los demás,  como superio...