Jueves 9.11.17
Salmos 119:97-106 "¡Oh, cuánto amo yo tu ley! Todo el día es ella mi meditación. Me has hecho más sabio que mis enemigos con tus mandamientos, porque siempre están conmigo.
Más que todos mis enseñadores he entendido, porque tus testimonios son mi meditación.
Más que los viejos he entendido, porque he guardado tus mandamientos; de todo mal camino contuve mis pies, para guardar tu palabra.
No me aparté de tus juicios, porque tú me enseñaste. ¡Cuán dulces son a mi paladar tus palabras! Más que la miel a mi boca.
De tus mandamientos he adquirido inteligencia; por tanto, he aborrecido todo camino de mentira.
Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino.
Juré y ratifiqué que guardaré tus justos juicios".
Uno de los primeros pasos para conocer los misterios, o verdades no entendidos de la Biblia, es empezar a leerla. Y luego de leerla, comprometerte a obedecerla.
Este capítulo de Salmos, está lleno de expresiones para experimentar a diario. Cuán poderosa es la Palabra de Dios, por lo que el salmista manifiesta: «¡Oh, cuánto amo yo tu ley! Todo el día es ella mi meditación» (v.97).
Una búsqueda firme y entusiasta te lleva a crecer en sabiduría y obediencia al Señor.
La Biblia no es el contenido de una fórmula mágica, es mucho más; es un sinfin de respuestas para tus dudas...por eso deberías leerla.
Y aunque algunos pasajes te sigan resultando desconcertantes, ve aferrándote a las verdades que ya has entendido. Agradece a Dios por la Biblia, un instructivo al cual no le faltó ninguna información.
Leer y obedecer la Palabra de Dios permite descubrir el amor y poder de Dios y de Jesucristo.
Dios te dirija a través de la Biblia, y te bendiga!📖
Wilda M.V.
(Referencia: Nuestro pan diario)
No hay comentarios:
Publicar un comentario