domingo, 12 de noviembre de 2017

"Tú palabra sabia de hoy"

Salmos 141:3,4,8,9  "Pon guarda a mi boca, oh Jehová; guarda la puerta de mis labios. No dejes que se incline mi corazón a cosa mala, a hacer obras impías con los que hacen iniquidad; y no coma yo de sus deleites. Por tanto, a ti, oh Jehová, Señor, miran mis ojos; en ti he confiado; no desampares mi alma. Guárdame de los lazos que me han tendido, y de las trampas de los que hacen iniquidad".

Muchos, ante cosas que no les gustan, o situaciones de impotencia, se enojan y se ven tentados a explotar.

La recomendación es orar, como hizo David: «Pon guarda a mi boca, oh Señor; guarda la puerta de mis labios" (vs 3).

De gran ayuda es: Pensar antes de hablar. ¿Son tus palabras buenas,  útiles, cordiales y agradables? Efesios 4:29 expresa que: "Ninguna palabra corrompida salga de tu boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes. Y el vs.31: "Quítense de toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia".

Para poner guarda a la boca, es necesario mantenerla cerrada, cuando nos irritemos o tengamos impotencia; y buscar la ayuda del Señor, a fin de decir las palabras correctas,  con el tono adecuado,  o para callar.

Nadie merece que tú, pese a la circunstancia que sea, maltrates verbalmente a nadie... Eso es  inaceptable.

Controlar las palabras es una labor de toda la vida. Gracias a Dios, si le buscamos, Él nos ayuda y produce en nosotros el querer como el hacer (Filip. 2:13).

Excelente día para decirle al Señor:  Ayúdame a pensar antes de hablar.

«Panal de miel son los dichos suaves…». (Prov. 16:24).

Feliz Domingo y que Dios te bendiga!

Wilda M.V.
(Referencia: Nuestro pan diario)

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