“Confía en Jehová, y haz el bien; habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad. Deléitate asimismo en Jehová, y Él te concederá las peticiones de tu corazón. Encomienda a Jehová tu camino, confía en Él; y Él hará. Exhibirá tu justicia como la luz, y tu derecho como el mediodía. Guarda silencio ante Jehová, espera en Él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino, por el hombre que hace maldades. Deja la ira, y desecha el enojo; no te excites en manera alguna a hacer lo malo”.
Confiar en el Señor es muy fácil cuando la vida sonríe y es sin problemas. Pero cuando el escenario no es como lo deseamos, la confianza en Dios puede debilitarse. Pero es bueno recordar que, también en momentos difíciles, Dios nos guía y ayuda a salir adelante.
Dios nos quiere ver cultivar la fidelidad hacia Él en toda situación. Y, para eso, necesitamos comprometernos con su voluntad, en lugar de frustrarnos o tratar de manipular circunstancias para conseguir resultados deseados.
Dios quiere ver a sus hijos descansar en Él, y con espíritu calmado. Eso, solo es posible cuando confiamos en que Él tiene el control, y que lo dispondrá todo para nuestro bien, y para su gloria. Esperemos con paciencia a que se haga evidente su voluntad perfecta.
Aunque no podamos ver ningún cambio, Dios estará obrando en nosotros y en nuestras situaciones. Nuestra tarea es mantener el enfoque en Él y continuar actuando con fidelidad a todo lo que nos ha llamado a hacer.
El que Dios, supuestamente se “demore”, da ¡oportunidad de desarrollar un carácter semejante al Suyo!
Feliz
día. ¡Dios te bendiga!
Evangelista
Wilda Messina
(Referencia:
En.Contacto)
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