19.3.19
1 Pedro 1:3-7 “Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que
según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la
resurrección de Jesucristo de los muertos, para una herencia incorruptible,
incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros, que sois
guardados por el poder de Dios mediante la fe, para alcanzar la salvación que
está preparada para ser manifestada en el tiempo postrero. En lo cual vosotros
os alegráis, aunque ahora por un poco de tiempo, si es necesario, tengáis que
ser afligidos en diversas pruebas, para que sometida a prueba vuestra fe, mucho
más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea
hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo”.
¿Atraviesas dificultades en este momento? Hay veces que los
pequeños problemas y el estrés cotidianos te desgastan y desaniman. Cualquiera
que sea la fuente de tu adversidad, el apóstol Pedro ofrece una perspectiva
clara para ayudar a recuperar la esperanza y el gozo.
1.Dios ha reservado una herencia en el cielo, que es
imperecedera, pura y eterna. Levanta la mirada, y no mires tus problemas. Si pones tu
esperanza en esta vida, las pruebas seguirán llevándote a la desesperanza. Como
hijo de Dios, tienes una herencia que superará, con creces, cualquier
sufrimiento.
2.Dios tiene el control de tus pruebas. Él se asegura que
tus tribulaciones logren su propósito. Él es soberano sobre toda adversidad, sabe
que es “por un poco de tiempo” en comparación con la eternidad.
3.Dios usa las pruebas para fortalecer tu fe. Cristo sabe que
quienes no creen de verdad se apartan con las aflicciones (Mateo 13.20-21). Pasar por el
sufrimiento y permanecer fiel a Cristo es un testimonio para los demás.
Además, cada prueba hace más fuerte tu
fe.
Regocíjate en la
esperanza eterna que tienes, soporta las
dificultades, ama a Cristo y sigue confiando en Él.
¡Feliz martes,
y que Dios te bendiga!
Evangelista Wilda
Messina
(Referencia: EncontactoOrg)
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