20.05.2022
"Por lo demás, sabemos que en todas las cosas interviene Dios para bien de los que le aman; de aquellos que han sido llamados según su designio. Ante esto ¿qué diremos? Si Dios está por nosotros ¿quién contra nosotros?” Amén.
Casi todo cristiano cita el versículo 28 de Romanos 8, para confortar a los demás, pero ¿con qué frecuencia lo aplicamos a nuestra vida? ¿Qué sucede cuando somos nosotros quienes estamos pasando por momentos difíciles, y nos decepcionamos? ¿Seguimos creyendo esas promesas?
No es lo mismo proclamar la fe en las verdades y promesas bíblicas, que aplicarlas a la vida en medio de tiempos difíciles. Porque una cosa es conocer las Sagradas Escrituras, y otra es vivirlas.
Tengamos presente que toda decepción es oportunidad para poner nuestra fe en acción. Son parte de la gran evidencia de que Dios nos ama, y usa las dificultades para hacernos madurar espiritualmente.
Aprendamos a sacar provecho de las circunstancias difíciles, a crecer en fe, sabiduría, comprensión del carácter del Señor y en el conocimiento de Él.
Aunque pudiera ser que lo mejor de Dios no sea lo esperado, Él ha prometido hacer que todo obre para nuestro bien... aún lo que nos decepciona.
Dios está más interesado en el valor eterno del crecimiento espiritual, que en nuestro alivio temporal en medio de dificultades. ¡Tengamos eso bien presente!
Muy feliz día, y que ¡Dios te bendiga!
Evangelista Wilda Messina
(Refer: En.Contacto)
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