Marcos 10:29-30 “Respondió Jesús y dijo: De cierto os digo que no hay ninguno que haya dejado [todo], por causa de mí y del evangelio, que no reciba cien veces más”.
¡Wao! Dios dice que va a devolvernos cien veces más. Y, ¿por qué las personas tienen necesidades? ¿Por qué no se cumple esta promesa? Es que esta promesa, como todas las demás, tiene condiciones. Veamos algunas:
Debemos ser generosos. Cuando eres generoso con los demás, Dios lo será contigo. Proverbios 11:25 dice “El alma generosa será prosperada”. Jesús lo dijo de otra manera, en Lucas 6:38, “Dad, y se os dará”.
Debemos darles ánimo a otros. No todos somos llamados a predicar y enseñar. Pero cada vez que cooperamos y motivamos a aquellos que lo hacen, somos socios en el ministerio. Dar nos permite involucrarnos con otros, y eso produce gozo.
Debemos invertir en el futuro. ¡Dios paga con intereses! Recuerda que Sus intereses son del 100%. Cada vez que das algo se registra en el cielo. Cada vez que eres generoso con la familia, iglesia, amigos, eso es registrado y recompensado. Es una inversión y el banco del cielo paga buenos intereses.
Debemos dar sacrificio agradable para Dios. Lo más agradable que puedes hacer por Dios es dar sacrificialmente. En Filipenses 4:18 Pablo dice “Lo que enviasteis fue olor fragante, sacrificio acepto, agradable a Dios.” Al ser más como Cristo, serás más generoso y eso, le agrada a Dios.
Lo más parecido a Cristo que puedes hacer es dar. ¡Él lo dio todo en la cruz del calvario para darte la promesa de vida eterna!
Feliz día. ¡Y que Dios te bendiga!
Mario De Jesús
(Referencia: VTRH.Ministries)
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