”Tu palabra sabia de hoy”

Salmos 146:8 “…Jehová levanta a los caídos; Jehová ama a los justos”.

Quien está caído, es porque, en algún momento, estuvo arriba y descendió. Puede que haya tenido buen empleo, un hogar estable, fidelidad en su pareja, excelente chequera, testimonio impecable, salud extraordinaria, hijos amorosos y obedientes, cuentas al día, vacaciones divertidas…

Alguno o varias de esos conceptos en caída, te llevan a la caída espiritual, la de tu alma.

Ahora han fallado las finanzas, la salud se quebró, alguien murió, el matrimonio está siendo golpeado, el empleo se perdió, el amor se apagó, la fe se murió, la amargura dijo presente…

En esos momentos miras hacia atrás, quisieras retroceder el tiempo, pero ya se ha marchado y, ni siquiera, se despidió. Llegó de sorpresa, y con muchas lágrimas.

Las caídas no te avisan, por eso duelen tanto. Y normalmente no se está preparado para hacerle frente… no se sabe hacia dónde escapar. Es como estar metido en un cuarto de 4 paredes, y a oscuras.

Ah…Pero es el mejor momento para iniciar levantando tu fe, humillarte y doblar, sinceramente, tus rodillas delante de Dios.

Lo mejor es que Dios te observa, y tiene dispuesto un servicio 911 (de emergencia), para venir en tu auxilio…”Él levanta a los caídos”.

Dios sabe cómo levantar a los que le clamen, en especial a sus siervos. Él conoce las profundidades del dolor, y la incapacidad nuestra para levantarnos.

Dios sabe que la caída podría hacernos morir, pero su asistencia es inmediata.  Mientras llores por el proceso, pero confíes en Dios, las puertas se abrirán, el sol volverá a brillar… Él tomará tu mano, y te levantará!

Una vez levantado: cántico de alabanzas a Dios deberás entonar.

¡Feliz día! ¡Dios te levante, y te bendiga!

Wilda M.V.

(Referencia: tabernaculoprensadedios)