Lunes 29.5.17
1 Samuel 17:9 "Si él pudiere pelear conmigo, y me venciere, nosotros seremos sus siervos; y si yo pudiere más que él, y lo venciere, ustedes serán nuestros siervos y nos servirán".
Hay veces que cuesta creer en las palabras de Dios, o que sus promesas sean para nosotros. Cuando el Señor habla de poderosos planes y proezas, el cristiano puede dudar. Además de duda, el miedo es otro elemento que puede venir. Decimos: “eso no es posible” “todo va a ser un fracaso” “¿y si todo sale mal?” entre otras muchas cosas.
Pero el Señor Jesús dijo: “para el que cree, todo le es posible”. No hay nada imposibles para Dios.
En la antigüedad perder una batalla significaba hacerse esclavo de aquel que vencía. Eso lo hace ver el gigante filisteo Goliat en estos versos de inicio.
Es una realidad que aplica en el mundo espiritual. Adán desobedeció al Señor y el enemigo se apropió de la autoridad sobre el planeta.
Por eso el mismo Señor sabiendo esto, derrotó en la cruz al diablo, y nos delegó su autoridad para vencer, no para estar bajo el yugo de las tinieblas, sino para avanzar y alcanzar los planes de Dios.
El miedo te puede generar parálisis, pero ten en cuenta que el libro de Proverbios enseña: “El temor del hombre pondrá lazo, mas, el que confía en Jehová será exaltado” (29:25).
El más grande enemigo de los hebreos no era el ejército filisteo, ni el gigante sino el miedo que llenaba sus corazones. Ese miedo los tenía paralizados, y por 40 días nadie salía a pelear contra Goliat.
Que eso que te atemoriza, no te impida avanzar, ni te estanque; cambia tu miedo por la fe en Dios y actúa.
No dejes que el miedo sea obstáculo que te impida batallar y creer en cosas poderosas y grandes de Dios.
No veas al gigante más grande de lo que en realidad es... Mira la grandeza y el poder de Dios.
Feliz lunes y que Dios te bendiga.
Wilda.
(Fuente de ref: Mensajes y sermones para predicar).
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