Tito 2.11-13 “Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todo hombre, enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente, aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo”. Amén.
Muchos
creyentes se sienten estancados, porque no
pueden dejar atrás el pecado que les hace tropezar.
Israel,
la nación elegida por Dios, tuvo una historia de derrotas por ceder a la
tentación en lugar de obedecer los mandamientos del Señor.
Dios
llama a sus hijos a vivir en obediencia, por lo
que no se trata de reinterpretar Sus mandamientos de manera conveniente.
El
mundo sin Cristo muestra poca o ninguna inclinación a seguir la voluntad de
Dios, aunque sabemos que le gustaría encajar en Su molde de abundantes
bendiciones.
Lo
peor de todo es que Satanás encuentra su punto de apoyo en esas vidas que desobedecen,
y pasan por alto las leyes de Dios.
Pecar
y seguir creyendo que se está centrado en Cristo, no funciona.
El Señor nos ordena rechazar toda impiedad, y es de sabios obedecerlo.
Qué
bueno que contamos con el poder del Espíritu Santo para
ayudarnos. Decidamos enfocar nuestra mente en la obediencia, sin
importar el costo.
Cuando
luchemos con las tentaciones, lo más sabio que podemos hacer es pedir ayuda de
Arriba.
Feliz día. ¡Que Dios bendiga, y te dirija!
Evangelista
Wilda Messina
(Referencia: En.Contacto)
No hay comentarios:
Publicar un comentario