05.08.2024
JUECES 13.2-5 “Y había un hombre de Zora, tribu de Dan, que se llamaba Manoa; y su mujer era estéril. A esta mujer apareció el ángel de Jehová, diciéndole: He aquí que eres estéril; pero concebirás y darás a luz un hijo. No bebas vino ni sidra, ni comas cosa inmunda. Porque concebirás y darás a luz un hijo; y navaja no pasará sobre su cabeza, porque el niño será nazareo a Dios desde su nacimiento, y él comenzará a salvar a Israel de mano de los filisteos”. Amén.
Servir a Dios puede no siempre parecerse a lo esperado, pero podemos descansar en su amor y fidelidad.
Hoy vemos como un ángel de Dios trae buenas noticias a una esposa estéril. Tendrás un bebé que será apartado para servir a Dios, y traerá liberación al pueblo.
Ella pudo haber pensado que la vida de su hijo estaría llena de felicidad. Y enseñaron a Sansón a seguir las pautas del voto nazareo de dedicación (ver Números 6.1-21).
Pero la vida de Sansón fue distinta a lo esperado por sus padres. Se involucró con mujeres paganas, incluyendo a la filistea Dalila, a quien amaba, y reveló el secreto de su fuerza. Y esta, lo traicionó vilmente.
Pero, al final, Dios permitió que Sansón recuperara sus fuerzas y cumpliera con la promesa de liberación. Aunque perdiendo él mismo su vida.
La fidelidad de los padres de Sansón debe recordarnos que no podemos predecir los acontecimientos, pero sí aferrarnos a las promesas de Dios. Él nos ama y puede hacer que todo sea para gloria de su Nombre.
Feliz día ¡Dios te bendiga!
Evangelista Wilda Messina
(Referencia: En.Contacto)
Lecturas
bíblicas completas: https://www.biblegateway.com/passage/?search=Jueces%2013&version=RVR1960
https://www.biblegateway.com/passage/?search=Jueces+16.4-31&version=RVR1960
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