23.07.2024
salmos 46.1-3 “Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. Por tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida, y se traspasen los montes al corazón del mar; aunque bramen y se turben sus aguas, y tiemblen los montes a causa de su braveza”. Amén.
Dios está con sus hijos en todo momento; podemos hablar con Él y descansar en su presencia siempre.
Es que: ¡Dios es nuestro amparo y fortaleza, pronto auxilio en tribulaciones! Tenemos razones más que suficientes para estarnos quietos. Independientemente de que sabemos que estar quietos, en los momentos difíciles, no es fácil.
La vida es una mezcla de cosas que preferiríamos no encontrarnos, por lo que siempre es necesario saber manejar el estrés de la manera más provechosa.
Hay veces que lo que necesitamos es hacer una pausa para descansar en la presencia del Señor Jesucristo. Aprendamos a tomar un breve descanso de nuestra tan apretada agenda para dar lugar a un encuentro significativo con Él.
La próxima vez que sientas que tu
estrés aumenta, date un momento para recuperarte.
Ora, respira el aire que Dios te ha dado, y descansa. Cuanto más a menudo lo
hagas, más de Él experimentarás y menos preocupaciones tendrás.
Feliz día ¡Dios te bendiga!
Evangelista Wilda Messina
(Referencia: En.Contacto)
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