24.06.2024
1 Juan 4.8-10 “El que no ama no conoce a Dios, porque Dios es amor. En esto se manifestó el amor de Dios en nosotros: en que Dios ha enviado a Su Hijo unigénito al mundo para que vivamos por medio de Él. En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que Él nos amó a nosotros y envió a Su Hijo como propiciación por nuestros pecados”. Amén.
Si alguna vez te has alistado en el ejército, unido a un equipo de rescate, o dado a luz un bebé, sabes que no se asumen tareas peligrosas por creer que la misión sea segura. No. Enfrentamos peligros porque alguien o algo que amamos vale la pena el riesgo.
Dios nos invita a no temer, y nos da ánimos para avanzar con obediencia, valentía y confianza.
Aunque el temor pueda impulsarnos a actuar, el amor es el motivador más poderoso. Hacemos por amor lo que nunca haríamos por temor.
Dios, quien creó este mundo, se hizo hombre para caminar entre nosotros y redimirnos. Quien murió para salvarnos, nos ha dado un amor perfecto. Demostremos ese amor de Dios, amándonos unos a otros.
¡Qué misión tan grande nos ha dado Dios: recibir su amor perfecto y demostrarlo a otros! Y donde abunda el amor, no queda espacio para temores.
El amor perfecto de Dios nos enseña a amar con valentía.
Feliz día. ¡Dios te bendiga!
Evangelista
Wilda Messina
(Referencia: En.Contacto)
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