Romanos 8.28 “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados”. Amén.
Si Dios permite que la adversidad llegue, es que tiene buen propósito para nosotros, y nos acompañará en todo momento.
Eres de los que, cuando la vida se te pone difícil, te preguntas: ¿Me estará castigando Dios? ¿Se habrá olvidado de mí? Recuerda que muchas veces solo estamos enfrentando consecuencias de pecados, o de decisiones insensatas.
Otras veces, estamos
bien firmes en Él, y ahí entendemos menos. Cuando enfermedad, muerte o alguna
otra fuerte adversidad llega, es aún más difícil entender el propósito de Dios.
Pero siempre Dios utiliza las dificultades para crecimiento de los creyentes. Sea para llamar nuestra atención, ayudarnos a vencer el orgullo o enseñarnos a odiar el pecado.
Hay veces que es solo para recordarnos nuestra dependencia de Él, o darnos herramientas para reconfortar y servir a los demás. Otras, Dios quiere mejorar nuestra comprensión de Él, o aumentarnos la fe.
Varios versículos bíblicos nos exhortan a gozarnos en medio de las pruebas, y nos recuerdan que todo lo que Dios hace es para el bien de quienes le amamos.
Puede que Dios no siempre calme la tormenta, pero aquietará nuestro corazón cuando clamemos a Él.
QUE DIOS TE ¡BENDIGA!
(Referencia: En.Contacto)
Tu Palabra Sabia de Hoy 15/11/23
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