Salmos 63.1-4 “Dios, Dios mío eres tú; De madrugada te buscaré; Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela, En tierra seca y árida donde no hay aguas, Para ver tu poder y tu gloria, Así como te he mirado en el santuario. Porque mejor es tu misericordia que la vida; Mis labios te alabarán. Así te bendeciré en mi vida; En tu nombre alzaré mis manos”. Amén.
¿Se te hace difícil pasar tiempo con el Señor? Cualquier momento del día es oportuno para estar con el Señor, pero la mañana es especial, y puede cambiar el resto del día.
Salmos 63 revela que David comenzaba su día con el Señor. Llenaba su alma con Esa plenitud, y estallaba en acción de gracias y alabanzas a Él. Y en la noche, seguía pensando en su Padre celestial. ¡Imagínate tener un día como el de David!
Aunque todo el tiempo con el Señor es precioso, separar el comienzo del día para escucharle hablar por medio de su Palabra, para hablarle en oración, para contemplar quién es Él y cómo obra, nos da la oportunidad de tener un excelente día.
Si te resulta difícil pasar tiempo con el Señor, te recuerdo que establecer hábitos comienza con pequeños pasos, no con grandes soluciones.
Dedícale a Dios, aunque sea, cinco minutos en esta mañana, y verás cuán diferente será tu día.
Feliz día. ¡Dios te bendiga!
Evangelista Wilda Messina
(Referencia: En.Contacto)
Tu Palabra Sabia de Hoy 17/11/23
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