Juan 8.31-34, 36 “Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si permanecen en mi palabra, serán verdaderamente mis discípulos; y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres. Le respondieron: Linaje de Abraham somos, y jamás hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Seremos libres? Jesús les respondió: De cierto, de cierto digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado. Así que, si el Hijo los liberta, serán verdaderamente libres”. Amén.
¿Te sientes estancado e incapaz de tomar buenas decisiones? Acude a Dios para encontrar las fuerzas necesarias para superarlo.
Libertad es una palabra maravillosa, al igual que amor o paz. Pero no es fácil de explicar. Todos la queremos, pero no todos están claros de cómo es.
Jesús dijo: Si permanecen en mi palabra, conocerán la verdad, y serán libres. Los judíos pensaban que el Señor hablaba de libertad política, pero se refería a otro tipo de libertad.
Ese concepto de libertad envuelve arrepentimiento y poner la confianza en Jesús, quien nos limpia del pecado y libera de su esclavitud.
El pecado pierde su poder sobre nosotros cuando rendimos nuestra vida al Señor. Y Dios ofrece victoria sobre la tentación y la limpieza de las manchas del pecado.
¿Cómo has experimentado la liberación del pecado en tu vida? Tómate un momento para expresarle tu gratitud al Señor por su amor y su perdón incondicionales.
Feliz día. ¡Dios te bendiga!
Evangelista Wilda Messina
(Referencia: En.Contacto)
Reflexión para el 05.10.23
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