#3,561
Jonás 2.6-7
“Descendí a los cimientos de los montes; la tierra echó sus cerrojos sobre mí para siempre; más tú sacaste mi vida de la sepultura, oh Jehová Dios mío. Cuando mi alma desfallecía en mí, me acordé de Jehová, y mi oración llegó hasta ti en tu santo templo”. Amén.
Hoy veremos 2 personajes bíblicos más que, pudiéramos decir, pasaron por estado de depresión, pero se refugiaron en Dios. Te recuerdo que depresión es un síndrome de tristeza profunda.
3ero. Jonás. Se enojó tanto cuando vio que Dios perdonó a la gente de Nínive, y su enfado fue tal que pidió a Dios la muerte, porque entendía que era lo mejor (4.3).
A primera vista, su
comportamiento no pareció ser el de una persona deprimida. No obstante, se ha
descubierto que una manifestación de la depresión es la ira. La cual puede ser una
forma de canalizar la tristeza, sin que muchos puedan darse cuenta.
**Pero Jonás sabía que orar a Dios, e invocarle en la
angustia, trae respuesta. Que tener a Dios presente, siempre le devolvería esa
paz y quietud que necesitaba.
4to.
Noemí. Pierde a su esposo y sus dos hijos
mientras vivía en un pueblo extranjero. El duelo y la inmigración también pueden
considerarse causas de depresión.
Cuando no estás en ambiente
conocido, ni con seres amados, es difícil.
Al Noemí regresar a su tierra natal pidió que la llamaran Mara, lo cual significa ≪amargura≫ (Rut 1:19-21). Pese a que el nombre de Noemí significa ≪dulzura≫.
Su corazón estuvo lleno de tristeza y amargura por las experiencias.
**Pero Noemí pudo ver a Dios, como restaurador de su alma y quien sustentaría su vejez. Esta mujer vino a ser parte de las generaciones del rey David (Rut 4.13-22).
Continuaremos…
Muy feliz día. ¡Dios te bendiga!
Evangelista Wilda Messina
(Referencia: CVC.La.Voz)
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