30.05.2022
1 Juan 5.10-12 "El que cree en el Hijo de Dios, tiene el testimonio en sí mismo; el que no cree a Dios, le ha hecho mentiroso, porque no ha creído en el testimonio que Dios ha dado acerca de su Hijo. Y este es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en su Hijo. El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida". Amén.
Nuestro Padre celestial quiere que sepamos que solamente tendremos la vida eterna por medio de su Hijo Jesucristo.
¿Qué garantía tenemos de ser salvos por la eternidad?
1. El amor de Dios. Nos da seguridad de salvación eterna, ya que es un amor incondicional. Jesús demostró en la cruz lo mucho que significamos para Él: murió por nosotros para que pudiéramos tener vida eterna.
2. La promesa del Señor Jesús. De que nunca estaríamos separados de Él y que nadie nos arrebataría de su mano (Juan 10.28). Él fue adelante a preparar un lugar para nosotros, y regresará para llevarnos allá (Juan 14.2-3).
3. El Espíritu Santo morando dentro de cada creyente. Esa es otra de nuestras garantías. El Espíritu Santo actúa como un sello, garantizando que pertenecemos al Señor, y es la promesa de que nuestra mejor opción de futuro está en el cielo con Dios.
La Biblia está llena de promesas, y Dios nos dice que los que han recibido a Jesucristo como su Salvador pasarán la eternidad con Él.
Te invito a meditar en ese Libro sagrado, y si estás batallando con dudas de estas grandes verdades; pide al Espíritu Santo que te guíe para tener comprensión bíblica en cuanto a tu salvación.
Muy feliz día, y que ¡Dios te bendiga!
Evangelista Wilda Messina
(Referencia: TPSH.291216)
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