Lunes 29
1 Juan 5.14-15
“Y esta es la confianza que tenemos en Él, que, si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, Él nos oye. Y si sabemos que nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho”.
Estamos
claros y consientes que a Dios le gusta escuchar oraciones sinceras, pero,
no las contesta todas como lo esperamos. Quiero mencionarte algunos elementos
a tomar en cuenta al orar.
1.
NO repitamos lo mismo una y otra vez (Mateo 6:7). Dios no desea escucharte repetir lo mismo, quiere que
le hables desde el corazón. NO le repitas lo mismo todos los días.
¡Eso NO sirve! Mira a Dios como un buen amigo, y ¡los buenos amigos son
sinceros! Cuando ores a Dios usa tus propias palabras NO las
repeticiones aprendidas.
2.
Que no recibimos, porque pedimos con malos motivos (Santiago 4:3). No creas
que Dios responderá toda oración si sabe que no le gustan. Un ejemplo:
alguien va a jugar por dinero, le pide a Dios buena suerte. ¿Responderá Dios
esa oración, habiendo Él dejado claro que no quiere ambiciosos
ni creyentes en la suerte? (Isaías 65:11-12; Lucas 12:15). Si deseas que Dios responda, asegúrate de que tus
oraciones estén de acuerdo con lo que dice la Biblia.
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