Salmos 37:5-6, 8-9 “Encomienda a Jehová tu camino, confía en Él; y Él hará. Exhibirá tu justicia como la luz, y tu derecho como el mediodía. Deja la ira, y desecha el enojo; no te excites en manera alguna a hacer lo malo. Los malignos serán destruidos, pero los que esperan en Jehová, ellos heredarán la tierra”.
¿Crees que Dios te daría a alguien que, lejos de amarte, te minimice, no te de confianza, y te haga sentir mal? No mi hijito. Eso solo ocurre cuando una relación NO viene de Dios. Lo que está a la vista no necesita lentes.
Suelta eso, que los malos o malvados se destruyen solos. Hay personas que pudieras creer que son ayuda idónea, pero, en realidad, son elementos erróneos. ¡Aprende a verlos a través de la Palabra de Dios!
Y 4. La persona indicada Dios la tiene preparada o la está preparando para ti. Ella, te amará, te respetará, te respaldará, y te aceptará tal como eres. Así es una relación bíblicamente sana.
Dios si sabe cómo formar complementos funcionales. Ora. Disfruta los negocios del Padre. Vive con gozo y paz, en lo que tu verdadero amor llega.
No le sueltes tu corazón a cualquiera. No dejes marchitar tu esencia. Que te baste el poder y la gracia del Señor.
Si has pasado, o estás pasando por una horrible historia de fracaso de amor, ¡cambia la hoja y comprende que la siguiente es mucho mejor. ¡Encomiéndale a Dios tu camino! Confía en Él. Los que en Él esperan, recompensa tendrán. Y ¡NO fracasarán!
¡Feliz y
bendecido día!
Evangelista Wilda Messina
(Referencia: Cristo.Juvenil)
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