Tu palabra sabia de hoy
05.12.2020
Salmos 4:2 “Hijos de los hombres, ¿hasta cuándo volverán mi honra en infamia, amaran la vanidad, y buscaran la mentira?
Éxodo 23:7 “De palabra de mentira te alejarás”.
¿De dónde viene el impulso de mentir? Lo primero que debemos decir es que viene de la simiente pecaminosa que nos acompaña, desde la caída de Adan y Eva en el huerto del Edén. Es una semillita que se ha mantenido germinando sin control.
Al mentir, a quien mientes es a ti mismo, y es a quien le faltas el respeto. Al jugar con ese “jueguito”, esparces falsedades que, en algún momento, se volverán en tu contra. Cambiarás la esencia de un hecho, bajo una fachada tranquilizadora, para agradar o quedar bien con alguien.
Qué pena es NO saber que Dios dice que enmudezcan los labios mentirosos, ya que hablan cosas duras con soberbia y menosprecio (Salmos 31:18).
Al quedar atrapado en el engranaje de la mentira, vivirás bajo falsa apariencia, jugarás un sucio “juego”; que probablemente seguirás, para encubrirte a ti mismo o para evitar el rechazo. Mentir es una vil forma de NO asumir quien realmente eres.
Mentir engendra mentiras. Es que, al servirte de ella, vas subiendo de nivel; con lo que sumaras más carga a tu maldad. Proverbios 21:28 dice que el testigo mentiroso perecerá; pero permanecerá el hombre que oye.
Triste es saber que gran parte de la humanidad se basa en mentiras, obviando el respeto y los valores establecidos por Dios, para convertirse en “modelos” de una sociedad que va de continuo hacia el mal. ¡No seas de esa, ya más… Con Jesucristo detendrás esa acción tan destructiva!
Feliz día, ¡y que Dios te bendiga!
Evangelista Wilda Messina
TPSH 011024
ResponderEliminar