Lectura de hoy en Hechos 5:29-32 (Respondiendo Pedro y los apóstoles, dijeron: Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres. El Dios de nuestros padres levantó a Jesús, a quien vosotros matasteis colgándole en un madero. A éste, Dios ha exaltado con su diestra por Príncipe y Salvador, para dar a Israel arrepentimiento y perdón de pecados. Y nosotros somos testigos suyos de estas cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen. )
Obediencia se define como subordinación al plan; conformidad con la norma; cumplimiento de las reglas; y sumisión a la voluntad de otro. La obediencia es lo primordial en la vida cristiana. Por ello, antes de tomar cualquier decisión, debemos saber lo que dice la Biblia en cuanto al asunto, qué acción quiere Dios que tomemos, qué actitud nuestra le agrada, y qué pasos hay que dar.
Obedecer significa hacer lo que Dios dice, en el tiempo y de la manera que dice que lo hagamos. Tenemos, entonces, que conocer sus instrucciones, porque no podemos cumplir con algo que no sabemos. El Espíritu Santo nos ayuda a relacionar nuestra situación con las instrucciones divinas, y a decidir cuál es la forma de proceder más prudente.
Sin embargo, una vez que decidimos obedecer y transitar por ese camino, podemos esperar oposición del enemigo. Éste puede utilizar las distracciones para desviar nuestra atención o tentarnos para debilitarnos poco a poco por medio de pequeños pasos de desobediencia. Pero, aunque Satanás quiere que desobedezcamos, podemos resistirlo renovando nuestra resolución de obedecer al Padre, así como lo hacía Jesús. Una obediencia como la de Cristo requiere el conocimiento de la Palabra (Mt 4.1-10), una acción obediente, y la determinación y la disposición de sufrir todas las consecuencias que se deriven de nuestra sujeción.
Cada vez que usted es tentado a desobedecer al Señor, su fidelidad y su lealtad a Cristo están en juego. Hágase estas preguntas: ¿Está aumentando mi comprensión de la Biblia? ¿Qué tan decidido estoy a obedecer al Señor? (De Encontacto.org)
…………………………………………..
Comentario:
Obediencia y sumisión a Dios, valores que no deben faltar en nuestras vidas… y quien hace estas cosas está en paz con Dios y con los demás.
Hacer lo que Dios nos manda, someternos a su voluntad, siempre trae recompensas positivas -aunque en un momento dado no lo parezca.
Para vivir dentro de esa voluntad que nos ordena el Padre, es IMPRESCINDIBLE conocer cuál es …y en la Biblia está la respuesta única, prudente y precisa.
Mediante conocer su Palabra, nos estaremos dando cuenta de todo eso que es esencial para nuestra vida; y que por otros medios JAMAS es posible.
Obedecer es querer agradar a Dios…Tan solo eso. Tomar la decisión de obedecer nos acercará mucho más a Él y nos retribuirá con bendiciones maravillosas y purificará nuestras almas.
Es tiempo de dejar de prestar atención a tantas cosas vanas y frívolas, y QUERER ANDAR EN LA VOLUNTAD Y OBEDIENCIA A DIOS.
Jesús y el Espíritu Santo, estarán presentes para ayudarnos a poder cumplir con ese deseo nuestro, tan pronto decidamos ponerlo en acción.
En 1 Pedro 1:22 nos dice que habiendo purificado nuestras almas por la obediencia a la verdad…nos amamos unos a otros entrañablemente, y con corazón puro.
Dios te bendiga
Wilda
No hay comentarios:
Publicar un comentario