2 Timoteo 1.6-7 “Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos. Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, amor y dominio propio”. Amén.
¿Qué haces cuando has perdido tu entusiasmo por servir? En la lectura de hoy, Pablo dice a Timoteo que avive el don de Dios que está en él.
Veamos maneras de nosotros hacer eso mismo, que Pablo pidiera a Timoteo:
1-Recarguémonos de poder del Espíritu Santo. Pidamos al Señor que recargue nuestra mente y corazón con su Santo Espíritu.
2-Reenfoquémonos. Nada disminuye tanto la fortaleza nuestra que fijar los ojos en el problema. Esto los hace más grandes. Pero cuando dirigimos nuestra mirada a Cristo, Él se vuelve más grande, y los problemas más pequeños.
3-Rechacemos todo lo que el diablo susurre. Él sabe decir: No lo puedes hacer. Nadie te quiere. Mejor ríndete, y cosas semejantes. En Juan 8.44 nos dice, sobre él: ha sido homicida desde el principio, es mentiroso, y padre de mentira.
4-Reconozcamos los pensamientos de desaliento que provienen de él, y no permitamos que echen raíces. Siempre busquemos pasar tiempo a solas con el Señor, a fin de reavivar nuestra relación con Él.
Revisemos estos pasos. Intentemos ajustarnos a ellos. Serviremos con mayor entusiasmo y compromiso.
Que tengas feliz día. 
¡Dios te bendiga!
Evangelista Wilda Messina
(Referencia: En.Contacto)
 
No hay comentarios:
Publicar un comentario