Proverbios 22.6 “Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él”. Amén.
Desde pequeños, los niños ponen su atención en los adultos y en su entorno. ¡Gran oportunidad para que nosotros influyamos positivamente en la próxima generación!
Algunas buenas maneras de entrenar a los pequeños son:
1. Invirtiendo
tiempo en ellos. Sea leyendo, hablándoles o
estando juntos al aire libre. Así, se desarrollará un buen modelo.
2. Escuchándolos atentamente. Debemos tratar de conocerlos bien a fondo, y mostrarles interés en las cosas que ellos consideran importantes.
3. Protegiéndolos con disciplina. Cuando se les disciplina con amor, podrán entender sabiduría, y que Dios pone límites, así como la importancia del autocontrol.
4. Admitiendo nuestros errores. La transparencia nuestra ayuda a los niños a acercarse a nosotros como padres. También les enseña humildad. Cuando nos tildamos de perfectos, a nuestros hijos les resultará difícil confesarnos sus errores.
5. Amándolos incondicionalmente. Debemos amar siempre a nuestros hijos, así como Cristo nos ama a nosotros.
Buscar las maneras de pasar tiempo con los niños, escuchémoslos, protejámoslos y demostrémosles el amor de Cristo.
Feliz
día. ¡Dios te bendiga!
Evangelista
Wilda Messina
(Referencia:
En.Contacto)
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