JUEVES 09.01.25
TU PALABRA SABIA DE
HOY
1 JUAN 5.13 "Estas cosas os he escrito a
vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis
vida eterna, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios". Amén.
El apóstol Juan escribió a la iglesia
primitiva, y quiso dejar claro que Dios ofrece a sus hijos vida eterna. Todo el
que está en Cristo, no teme a la muerte física, porque su verdadera vida —su
vida eterna— está segura en Jesús.
El objetivo del ministerio de Juan era
fortalecer al creyente con la fe inquebrantable de la vida eterna en Cristo.
La base para esta verdad radica en:
1. Las promesas inmutables de Dios. Juan declara la
garantía de Dios en cuanto a la vida eterna. Por ejemplo, cita las promesas de
Jesús sobre la eternidad. (Juan 3.16; 6.40; 10:27-30).
2. El amor incondicional de Dios. Nuestro Padre
celestial nos ama tanto, que quiere relacionarse eternamente con nosotros. Para
lograr esto, demostró su amor de manera asombrosa: al darnos la salvación a gran
precio (Rom.5.6-11; 8.3-39).
3. La obra consumada por Cristo en la cruz. Al ofrecer su vida
en sacrificio expiatorio por nosotros, Jesús proveyó al mundo de salvación, de
una vez por todas. Nuestra parte es aceptar ese regalo que Él nos da sin
restricciones.
4. El testimonio del Espíritu de Dios a
nuestro corazón.
Nuestro Padre celestial pone su Santo Espíritu en cada creyente para dar
testimonio de la verdad de nuestra salvación (Rom.8.15-17).
Podemos tener absoluta seguridad de nuestra
salvación en Cristo. ¿Refleja esa confianza tu vida?
Feliz día. ¡Dios te
siga bendiciendo
y guardando!
Evangelista Wilda
Messina
(Referencia: TPSH300813)
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