VIERNES 10.01.25
TU PALABRA SABIA DE
HOY
2 CORINTIOS 12.7-9 "Y para que la
grandeza de las revelaciones no me exaltase desmedidamente, me fue dado un
aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para
que no me enaltezca sobremanera; respecto a lo cual tres veces he rogado
al Señor, que lo quite de mí. Y me ha dicho: Bástate mi gracia;
porque mi poder se perfecciona en la debilidad… Amén.
Si alguna vez has tenido una astilla en el
dedo o una piedrita en tu zapato, sabes cuán molestoso es. Hay ciertos
problemas que nos acompañan y parecen insoportables. Tenemos dos opciones: angustiarnos
y alejarnos de Dios, o confiar y creer en Él.
La Biblia nos menciona que el apóstol Pablo
tenía un “aguijón” (o una astilla) en su vida, que lo atormentaba
y humillaba. Sobre esa situación difícil, Pablo oró tres veces para que
le fuera quitada, pero Dios solo le prometió gracia para perfeccionarse.
Cuando te falten las fuerzas, recuerda que puedes
hacer frente a las dificultades, porque el Todopoderoso irá contigo, y te promete
que la leve tribulación producirá excelente y eterno peso de gloria (2
Corintios 4.17).
El sufrimiento es oportunidad de acercarte a
Dios.
Donde la paciencia puede hacer su obra, sin que te falte cosa alguna (Stgo.1.4).
Pablo aprendió a regocijarse en su debilidad. Y a entender que todo
lo puede en Cristo, quien le fortalece.
En circunstancias difíciles, quienes
invocamos al Señor descubrimos que Él es todo lo que realmente necesitamos.
Feliz día. ¡Dios te
siga bendiciendo
y guardando!
Evangelista Wilda
Messina
(Referencia: En.Contacto)
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