Viernes 06/09/2024
1ER. LIBRO DE REYES 2.1-4 “Llegaron los días de David morir, y dijo a Salomón su hijo: Yo sigo el camino de todos en la tierra; esfuérzate, y sé hombre. Guarda los preceptos de Jehová tu Dios, anda en sus caminos, y observa sus estatutos, mandamientos, decretos y testimonios, de la manera que está escrito en la ley de Moisés, para que prosperes en todo lo que hagas y emprendas; para que confirme Jehová la palabra que me dijo: Si tus hijos guardaren mi camino, andando delante de mí con verdad de todo corazón y alma, jamás faltará a ti varón en el trono de Israel”. Amén.
Supongamos que la persona más sabia que conoces te deja un manual para la vida. ¡Qué gran tesoro! Algo parecido hizo el rey David por su hijo Salomón, a quien le dejó instrucciones sabias y precisas.
Salomón escuchó a su padre y aseguró su reino. Aunque no era perfecto, amaba al Señor y era humilde; le pidió ayuda para liderar al pueblo (1Reyes 3.3, 9).
Nosotros también podemos practicar los consejos adquiridos por experiencias de otros. Pero lo más importante es que la Palabra de Dios brinda guía fiable a través de sus estatutos, ordenanzas y testimonios.
Es indiscutible encontrar situaciones difíciles. Cuando eso ocurra, valora la sabiduría recibida de otros. Aunque nunca será más valiosa que el tiempo que puedas pasar con el Señor.
Feliz día y que Dios te bendiga.
Evangelista Wilda Messina
(Referencia: En.Contacto)
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