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Efesios 6.18-19 “Orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos; y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del Evangelio”. Amén.
Los últimos tópicos por destacar…
7. Orar por los predicadores, maestros, evangelistas, misioneros que están en el frente de batalla. Los que están llevando el mensaje por doquier, tienen una especial necesidad de las oraciones del pueblo de Dios (Hechos 4:29).
Son personas que tienen gran trabajo en la obra de Dios. Oremos para que sean portadores de palabras sabias y de gracia para predicar el Evangelio.
Y 8. la forma más efectiva de nuestra oración es “en el Espíritu”. Ese es el gran secreto.
Mira lo que dice en Romanos 8:26-27: “Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles. Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos”.
Recuerda que Satanás tiembla cuando ve un cristiano de rodillas. Así que ¡A ORAR!
Feliz día. ¡Dios
te bendiga!
Evangelista Wilda Messina
(Referencia:
Words.of.Life.Minsitries)
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