01.06.22
Romanos 5.3-5
"… Nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza; y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado”. Amén.
Hace años, la gente esperaba las noticias en los periódicos. Hoy, nos enteramos de todo durante las 24 horas. Inclusive, en el mismo momento del hecho. Valorando esta sociedad la mayor velocidad.
Es cierto que existen ventajas en obtener todo rápido, pero también puede robarnos el fruto del Espíritu, de la paciencia, muy beneficiosa en toda área de la vida cristiana.
¿Estás siendo influenciado por la mentalidad de esta sociedad? Con frecuencia adoptamos valores mundanos sin darnos cuenta.
Paciencia es la capacidad de sobrellevar dificultades, estrés o molestias con serenidad, o sin quejas. Es la idea de ser calmado aun en problemas.
¿Estás dispuesto a perseverar en pruebas o retrasos con actitud amable? ¿Puedes pasar por alto un mal en lugar de reaccionar con ira?
La paciencia divina tampoco es algo natural. Es don del Señor que se nos otorga como fruto de su Espíritu (Gálatas 5.22-23). Pero debemos cooperar mientras Dios lo desarrolla en nosotros. Y, como Él conoce las circunstancias precisas, nos ayudará.
Aunque pensemos que nos va bien, todos necesitamos desarrollar más paciencia. Virtud que deberíamos desear todos los cristianos. Algunos evitan orar por ella, ya que no quieren que su paciencia sea probada. ¡Pero, vale la pena!
Muy feliz día, y que ¡Dios te bendiga!
Evangelista Wilda Messina
(Referencia: En.Contacto)
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