Lucas 12:19-20 “Y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes guardados para muchos años. Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será?”
¿Sabías que Dios no se opone a las riquezas? Se opone al mal uso y abuso de ellas. Dios quiere que usemos la riqueza sabiamente, sin importar cuánto o cuan poco tengamos.
Lo que le importa a Dios no es cuánto ganas, sino cuál es el efecto de esas ganancias en tu vida. Puedes ganar tanto dinero como desees, pero deberías cumplir 4 requisitos básicos.
Que no perjudique tu salud: Algunas personas amasan fortunas y luego sufren un infarto. Dice en Proverbios 23:4 que no te desgastes tratando de hacerte rico, en vez, se suficientemente sabio para saber cuándo detenerte. La vida debe tener prioridad sobre las riquezas.
Que no lastime tu familia: Son muchas las familias que se han derrumbado por la gran ocupación de ganar dinero para comprar cosas. Tu familia prefiere atención más que cualquier cosa que puedas comprarle.
Que no se lastime a otros: La visión del mundo es pisar a quien tenga que pisar para lograr el éxito. Proverbios 21:6 dice que la riqueza fruto de mentiras es neblina que se esfuma, y trampa mortal. Gana dinero honesto y justo. No lastimando a otros.
Que mantenga tu vida espiritual al mismo nivel: Dios quiere que estés en equilibrio. El desea que tú seas prosperado en todo, y que tengas salud, así como prospere tu alma (3 Juan 1:2). Si vas a establecer metas financieras, también establece las espirituales.
Si tu crecimiento espiritual va acorde a tu prosperidad financiera, ¡vas muy bien! Pero si llevan a balance negativo acerca de tu relación con Dios, estás en serios problemas.
Feliz día. ¡Y que Dios te bendiga!
Evangelista Wilda Messina
(Referencia: VTRH Ministries)
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