Tu palabra sabia de hoy

Lunes 16.03.2020

Romanos 12:6, 8 “De manera que, teniendo diferentes dones, según la gracia que nos es dada, … el que exhorta, en la exhortación; el que reparte, con liberalidad; el que preside, con solicitud; el que hace misericordia, con alegría”.

De todos los dones del Espíritu Santo, el ministerio de exhortar (estimular) quizás no es tan apreciado, pero también debe asumirlo la iglesia. ¿Cuándo fue la última vez que el "don de exhortar a otros" lo ejecutaste?

Sea que el Espíritu de Dios te haya otorgado esa gracia especial para que puedas edificar la fe de los demás, o no; pide a Dios que te enseñe cómo poner en práctica esa unción especial.   Cómo hacerlo?...

1. Anima y exhorta compartiendo tu fe! Deja que eso fortalezca a otros en el Señor, o que están pasando por momentos muy débiles! Tu fe sólida puede ayudar a los que están luchando o caídos. Tus palabras y acciones -llenas de fe- serán antídotos contra la desesperanza de muchos que han perdido sus fuerzas espirituales.

2. Anima a otros compartiendo las Escrituras y hablándoles de la salvación en Jesús. Recuerda: “La fe viene como resultado de oír el mensaje” (Rom. 10:17). Mientras hablas la Palabra de Dios, la fe puede nacer en aquellos que la oyen.

3. Cuando Pablo no podía infundir ánimo a la iglesia, oraba para que el Espíritu Santo llevara a cabo la misma obra. De igual manera, si no puedes animar y exhortar personalmente a otros, puedes levantarlos en oración. ¡Ese también es un gran privilegio!

¡Dios te bendiga!

Evangelista Wilda Messina

(Referencia: WorldChallengeOrg)