martes, 4 de diciembre de 2018

”Tu palabra sabia de hoy”


Miércoles 05.12.18

Salmos 19.12-14  “¿Quién podrá entender sus propios errores? Líbrame de los que me son ocultos. Preserva también a tu siervo de las soberbias; que no se enseñoreen de mí; entonces seré íntegro, y estaré limpio de gran rebelión. Sean gratos los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón delante de ti, Oh Jehová, roca mía, y redentor mío”.

Nuestras palabras pueden ser herramientas del bien. Por ejemplo, podemos hablar al Padre celestial a favor de nosotros mismos y de otros; podemos comunicar la verdad de Jesucristo y cantar alabanzas; podemos capacitar, motivar, animar y alertar; y podemos expresarnos lealtad unos a otros.

También nuestras palabras pueden hacer daño. Se pudiera comenzar con algo pequeño -un comentario breve acerca de un conocido… Otras, podemos expresar nuestra opinión de una manera acusadora, por curiosidad, o hacer una pregunta buscando una respuesta negativa. Las preguntas y los comentarios que haces pueden sembrar semillas de duda y desconfianza que dañen la reputación de otra persona. Otra palabra para esto es “chisme”.

Dios habla fuertemente en contra del chisme, ya que este separa a los amigos íntimos, traiciona la confianza y provoca desacuerdos. Observa cómo identifica Dios a los acompañantes del chisme en Romanos 1.29, 30, los describe con términos tales como injusticia, perversidad, avaricia, y también como detractores y aborrecedores de Dios.

Pídele al Espíritu Santo que te muestre la verdad en cuanto a las palabras que usas, y que transforme cualquier actitud del corazón que pueda incitarte al chisme. “De la abundancia del corazón habla la boca” (Mt.12.34). Se alguien que protege la reputación de otros, sean familiares, compañeros de trabajo, creyentes o no. Se siempre una bendición con tus palabras.  El Señor las toma muy en cuenta.

Feliz miércoles, y que Dios te bendiga!

Wilda M.V.
(Referencia: EncontactoOrg)


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