Sábado 31/12/16
Éxodo 15:23-25 "Y llegaron a Mara, y no pudieron beber las aguas de Mara, porque eran amargas; por eso le pusieron el nombre de Mara. Entonces el pueblo murmuró contra Moisés, y dijo: ¿Qué hemos de beber? Y Moisés clamó a Jehová, y Jehová le mostró un árbol; y lo echó en las aguas, y las aguas se endulzaron. Allí les dio estatutos y ordenanzas, y allí los probó".
Mara = amargura. Las muchas pruebas y luchas dan sabor amargo a la vida. Muchos hemos sido afligidos en este año; sin embargo, al someternos a Dios -con fe y obediencia-, hemos visto gran parte de sus promesas cumplirse.
Mañana se abrirá una nueva etapa, un nuevo año: en que vendrán nuevos retos, nuevas caídas y nuevas bendiciones.
Es hora de recapitular, echar un vistazo a lo vivido, soltar la presión, las aflicciones, las raíces de amargura, las heridas y tristezas.
Es tiempo para traer las vivencias del pasado, revisarlas, renovar fuerzas, hacer mejoras… comenzar a vivir -con fe y obediencia- lo nuevo que habrá de venir.
Aunque en el 2017 volvamos a beber de las aguas amargas de Mara, Dios nos volverá a guiar donde podremos beber aguas dulces y refrescantes.
*El gran consejo es*: cuando te enfrentes con momentos de Mara, mires la mano de Jesús que te ofrecen ríos de agua dulce y lugares de reposo. Cristo es el puente que te hará cruzar al otro lado de tus maras, de tus pruebas. Cuesta trabajo vivir rodeado de aguas amargas, pero hay un Cristo que vino para endulzarlas!
Dice Éxodo 15:27, con relación al pueblo de Israel: "Y llegaron a Elim, donde había 12 fuentes de aguas, y 70 palmeras; y acamparon allí junto a las aguas". En Salmos 84:5-7 y 10 nos dice: "Bienaventurado el hombre que tiene en ti sus fuerzas, en cuyo corazón están tus caminos. Atravesando el valle de lágrimas lo cambian en fuente, cuando la lluvia llena los estanques. Irán de poder en poder; verán a Dios en Sion. Porque mejor es un día en tus atrios que mil fuera de ellos…"
En Dios NO tendrás aguas amargas, sino amor, misericordia, crecimiento, dulzura y paz!
Dios te bendiga en este 2017; te dirija, te guarde y te permita tomar la menor cantidad de agua de Mara… y que te agarres bien a ese árbol que endulzará esas aguas... Cristo!
Un fuerte abrazo!
Evangelista Wilda M.V.
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