MIERCOLES 29.01.25
TU PALABRA SABIA DE
HOY
HECHOS 2.37-38… “Al oír esto, se compungieron de corazón, y dijeron a Pedro y a
los otros apóstoles: Varones hermanos, ¿qué haremos?”.
Si se ha caído en la
trampa del enemigo, de dejarse atrapar y enceguecer
por un amor que no conviene, pero ya han sido abiertos los ojos, y entendido
que es preciso salir de ahí, aquí algunos consejos…
1) Lo primero es entender
que será un proceso: No hay clave mágica para
levantarte mañana y creer que ya todo está olvidado. No te engañes, es un
proceso que comienza.
En el camino, vendrán
recuerdos, sentimientos encontrados, suspiros y más. Pero eso no
quiere decir que no se pueda superar. NO te desanimes. Todo lo puedes
en Jesucristo, que fortalece.
Vendrán deseos de llamar por teléfono, de escribir mensajes de texto o visitar; hasta pudieras volver
a caer, pero NUNCA te desanimes, ni retrocedas, que es parte del proceso.
Ahora bien, esfuérzate en ir reduciendo esos deseos.
La determinación es tu arma.
Mientras no tengas verdadera determinación, tus esfuerzos
solo serán de palabras. Cuando hablo de determinación, hablo de convicción o
creencia
inquebrantable que guíe tus acciones, es QUERER y HACER -hasta lo imposible- por cambiar
el panorama, que no le agrada a Dios para ti.
Tu determinación tiene
que salir del corazón. Solo así obtendrás la victoria. Esfuérzate y se
valiente, no temas ni desmayes. ¡Dios estará contigo!
Continuaremos…
Que ¡Dios te de
convicción y te bendiga!
Evangelista Wilda
Messina
(Referencia: cristojuvenil)
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