Salmos 37.21 “El impío toma prestado, y no paga; el justo tiene misericordia, y da”.
Si no quieres ser considerado malo ante Dios, tú debes ser integro acerca de tu manejo de tus finanzas.
¿Qué deberías hacer en caso de estar muy endeudado?
1. Toma un cuaderno para apuntes, y prioriza tus deudas
por tipo (préstamos, tarjetas, etc.). Las de mayores intereses, ponlas de
primero.
2. Se bien preciso anotando tus deudas, y en qué plazo pagarás.
¡No olvides ninguna!
3. Define el monto total de pago mensual, ¡y hónralo!
4. Trabaja arduamente por ello. ¡Pídele
a Dios que te abra puertas y estrategias claras!
5. No te demores en pagar.
6. Deja de
endeudarte más.
7. No pagues una tarjeta con otra.
8. No contraigas una deuda sin trabajar o estar claro cómo
obtendrás el dinero.
9. Aprende a ahorrar, no para gastarlo en simplezas después, sino con propósito.
Quiero que sepas que Dios paga deudas, pero no apoya lo que, sin su consentimiento, asumiste. Aunque, si entras en el deseo de honrarle, ¡te puede ayudar!
1. Prioriza pago de deudas. Cuando el dinero es escaso, puede que lo último que pienses es en pagar… y a largo plazo, te endeudas más y más. Los intereses, y relaciones con tus acreedores, puede empeorar. Perderás libertad, porque siempre tendrás un pago pendiente.
Si desde ahora priorizas tus deudas, no solo disminuirás la tasa de intereses, sino que después que te recuperes no tendrás que preocuparte por continuar pagando.
Durante ese tiempo de pago y recuperación, no caigas en tentación de prolongar plazos de pago o pedir otro préstamo; enfócate en sacar el máximo provecho de tus ingresos.
Continuaremos…
Feliz día. ¡Y que Dios te bendiga!
Evangelista Wilda Messina Ventura
(Referencia: CVC.La.Voz)
No hay comentarios:
Publicar un comentario