Tu palabra sabia de hoy
Sábado 27.6.20
Romanos 3.21-22 “Pero ahora, aparte de la ley, se ha manifestado la justicia de Dios, testificada por la ley y por los profetas; la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen en él. Porque no hay diferencia”.
"Todas las personas nacen libres e iguales en dignidad y derechos". Así comienza el primer artículo de la Declaración Universal de los Derechos Humanos del 10 de diciembre de 1948.
Todos somos iguales y tenemos los mismos derechos. ¿Crees eso? Ese es el ideal, el sueño, pero no la realidad. Por eso esta Declaración fue proclamada y adoptada por la ONU.
Aun hoy, nuestros derechos siguen sin ser respetados, y nosotros mismos no respetamos los derechos de nuestro prójimo.
Y ¿Cuál crees que es la solución? ¿Más leyes, más declaraciones? ¡No! La única solución: ¡EL AMOR!
La prueba de que esto es verdad viene del mismo Dios. Él resolvió nuestro mayor problema con amor, por lo que nos dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree no se pierda, sino que tenga vida eterna (Juan 3:16)
Hoy es un momento especial para decirle a Dios: Ayúdame a ser justo/a. A
respetar los derechos de mi prójimo, para que la
justicia, la fraternidad y el amor prevalezcan sobre el egoísmo y la
injusticia. “Porque en Dios no hay acepción
de personas” (Rom. 2:11).
Gálatas 3:28 nos recuerda que: No hay judío ni griego; esclavo ni libre; hombre ni mujer; porque todos somos uno en Cristo Jesús.
Feliz sábado. ¡Dios te bendiga!
Evangelista Wilda Messina
(Referencia: Alimento.Diario)
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