Tu palabra sabia de hoy
Miércoles 01.07.20
1er.
libro de Reyes 22.7-8 “Y dijo Josafat: ¿Hay aún aquí algún profeta
de Jehová, por el cual consultemos? El rey de Israel respondió a Josafat: Aún
hay un varón por el cual podríamos consultar a Jehová, Micaías hijo de Imla;
mas yo le aborrezco, porque nunca me profetiza bien, sino solamente mal. Y
Josafat dijo: No hable el rey así”.
Acab había reinado en el reino del norte de Israel. Su vida se resumió en
pocas palabras: “se vendió para hacer lo
malo ante los ojos de Jehová…” (1 Reyes 21.25).
Acab invitó a Josafat, rey de Judá, a unirse a él en la guerra para
recuperar a Ramot de Galaad. Sus 400 profetas
asalariados le aseguraron una gran victoria. Pero Josafat preguntó a Acab
si había algún profeta de Jehová para consultar. Acab le mencionó a Micaías; diciendo que lo aborrecía,
porque solo le profetiza mal.
Micaías fue mandado a sacar de prisión, y le exhortaron que anunciara al rey cosas buenas; él respondió: vive Jehová, que lo que Él me hablare, eso
diré (13, 14). Micaias sabía que la
obediencia a Dios era más importante que su libertad. Les profetizó que Israel
se veía esparcido como ovejas sin pastor (17). Y murió Acab (34-37).
Despreciar la Palabra de Dios,
como lo hacía Acab, debe ser una advertencia para todos. Aprendamos a guardarla en el corazón, y el pensamiento. La Palabra de
Dios es gloriosa, edificante,
amonestadora y restauradora. ¡Que la
Palabra de Dios sea lámpara, constantemente encendida, para tu camino!
Feliz miércoles. ¡Dios te bendiga!
Evangelista Wilda Messina
(Referencia: El.Camino.Bíblico)
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