Tu palabra sabia
de hoy
Viernes
03.01.2020
Levítico 22.17-20
“También habló Jehová a Moisés, diciendo: Habla a Aarón y a sus hijos, y a
todos los hijos de Israel, y diles: Cualquier varón de la casa de Israel, o de
los extranjeros en Israel, que ofreciere su ofrenda en pago de sus votos, o
como ofrendas voluntarias ofrecidas en holocausto a Jehová, para que sea
aceptado, ofreceréis macho sin defecto de entre el ganado vacuno, de entre
los corderos, o de entre las cabras. Ninguna cosa en que haya defecto
ofreceréis, porque no será acepto por vosotros”.
En la Ley, Dios le dio a los judíos reglas estrictas con respecto a los sacrificios:
¡Sin defecto! Cuando los israelitas ofrecieron animales ciegos, cojos y
enfermos, el Señor les pedía cuentas (Malaquías 1.8).
Los sacrificios, en el Antiguo Testamento, cubrían pecados, y eran sombra del plan de redención final del
Padre celestial, mediante Jesucristo (Juan 3.16).
Para ser sacrificio aceptable, tenía que ser perfecto. No tocado por el
pecado original de Adán. Cristo fue concebido por el Espíritu Santo, y vino del cielo al vientre de María sin
intervención humana, diferente de todo niño nacido de una mujer y un hombre.
Tu salvación depende de la
naturaleza impecable de Cristo! Jesús fue
ese Cordero perfecto! Sin manchas. Para
reclamar la ofrenda hecha a favor tuyo, debes poner tu fe en Él.
¿Crees que su muerte te salva de la condenación por tus pecados? Si no estás seguro, toma un momento para
reflexionar sobre el sacrificio de Dios, y pídele que guíe tu corazón.
¡Feliz 2020 con
Cristo, y que Dios te bendiga!
Evangelista
Wilda Messina
(Referencia: EncontactoOrg)
No hay comentarios:
Publicar un comentario