“Tu palabra sabia de hoy” Domingo 04.08.19

Eclesiastés 5:4-7 “Cuando a Dios haces promesa, no tardes en cumplirla; porque él no se complace en los insensatos. Cumple lo que prometes. Mejor es que no prometas, y no que prometas y no cumplas. No dejes que tu boca te haga pecar, ni digas delante del ángel, que fue ignorancia. ¿Por qué harás que Dios se enoje a causa de tu voz, y que destruya la obra de tus manos? Donde abundan los sueños, también abundan las vanidades y las muchas palabras; mas tú, teme a Dios”.

Hoy, leyendo en Eclesiastés 5, me inspiró destacar algunos aspectos de esa lectura. Veamos:

Si vas a la casa de Dios, acércate más para oír (su Palabra) que para ofrecer sacrificio de necios. No seas rápido de boca, ni tu corazón se apresure a decir palabra delante de Dios, porque de multitud de palabras viene el necio.  No dejes que tu boca te haga pecar, ni digas que fue ignorancia; tú, teme a Dios.

Si prometas a Dios, cumple, no seas insensato. Mejor no prometas. Ten siempre presente que sobre uno alto vigila otro más alto.

Si eres de los que ama el dinero, te recuerdo que nunca te saciarás de él… y eso es vanidad. Al aumentar tus bienes, también aumentará tu consumir, ya que tendrás sueños, que querrás ver realizados.  Tampoco te afanes en guardar riquezas para tu mal; ellas se pierden en malas ocupaciones, y al final, nada queda.  Recuerda que eres polvo, que desnudo saliste del vientre de tu madre, y así irás a la sepultura.

Con tus riquezas y bienes, construye un puente que te lleve a hacer depósitos en la Patria celestial; para que al final de tu vida, no tengas que decir como dijo el Predicador (rey Salomón) : Vanidad de vanidad, todo es vanidad!

Dios te bendiga en este día!

Evangelista Wilda Messina