14.09.2018
Isaías 30:1-2 ¡Ay de los
hijos que se apartan, dice Jehová, para tomar consejo, y no de mí; para
cobijarse con cubierta, y no de mi espíritu, añadiendo pecado a pecado! Que se apartan para descender a Egipto, y
no han preguntado de mi boca; para fortalecerse
con la fuerza de Faraón, y poner su esperanza en la sombra de Egipto”.
“Ay” significa profunda aflicción… Sea por rebelión, retroceso, por estar o
buscar donde no debes… por alejarte o nunca venir al Señor. Este “ay” también
expresa: Me dejó mi pueblo, no me
busca, no me pide dirección ni consejo. Por el contrario, se apoya en sí mismo,
y sus fuerzas… Se va al mundo (a Egipto) en busca de ayuda… Ay, acumulas
pecado sobre pecado!
Muchos piensan que rebelión es solo recurrir a drogas, alcohol,
inmoralidad sexual y otros pecados graves; pero la rebelión a la que Dios se
refiere aquí es también dolorosa. Su
propio pueblo lo ignora, y cree que
sabe cómo hacerlo.
El que es
verdaderamente pueblo de Dios, debe CONFIAR en Él EN TODA SITUACIÓN, sin importar lo insignificante que sea. Debe
aprender a decir: En ti ha confiado mi alma, y en la sombra de tus alas me
ampararé (Salmos 57:1).
Dios entristece
cuando actúas sin esperar a que sea Él quien lo haga. Tú debes orar, y dejar que Él tenga el control. Pero
tú, ante cualquier crisis, tomas el asunto en tus manos. Recuerda: el tiempo del Señor, es taaan diferente al tuyo!
Tomando tú las
decisiones, impedirás que el plan perfecto de Dios se cumpla. Solo Dios te promete un lugar de refugio, y
regocijo pleno… cuando confías en Él.
Feliz viernes!
Wilda M.V. (Referencia:
WorldChallengeOrg)
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