30.08.2018
Lucas 15:1-4 "Se acercaban a Jesús todos los publicanos y pecadores para oírle, y los fariseos y los escribas murmuraban, diciendo: Este a los pecadores recibe, y con ellos come. Entonces él les refirió esta parábola, diciendo: ¿Qué hombre teniendo 100 ovejas, si pierde una de ellas, no deja las 99 en el desierto, y va tras la que se perdió, hasta encontrarla?".
Se cuenta que una joven llamada Edith, decidió seguir a Jesús. Confesó que la religión no le interesaba, pero un domingo entró en una iglesia para buscar algo que saciara su alma insatisfecha. Ese día leyeron Lucas 15:1-2: «Se acercaban a Jesús todos los publicanos y pecadores para oírle, y los fariseos y los escribas murmuraban, diciendo: Este a los pecadores recibe, y con ellos come».
Eso decía, pero ella oyó: «Este a los pecadores recibe, y con Edith come». ¡Se dio cuenta de su error, y la idea de que Jesús recibe a los pecadores —incluyendo a Edith— Esa tarde decidió acercarse a Jesús. Empezó a leer los Evangelios, y poco después, aceptó a Cristo como su Salvador!
Los religiosos de la época de Jesús se escandalizaban de que él se juntara con personas pecadoras. Sus reglas les prohibían juntarse con esas personas. Pero Jesús no prestó atención a esas reglas, y recibió a los despreciables y marginados; se reunió con ellos sin importar lo alejados que estuvieran.
Aún sigue siendo así! Jesús sigue recibiendo a los pecadores, también a ti (pon aquí tu nombre).
Da gracias al Padre por el amor de su Hijo, y porque recibe a todos, sin importar cual sea la condición.
Dios nos busca en nuestro extravío; nos recibe con nuestra pecaminosidad; y nos sostiene en el quebrantamiento!
Feliz día. Reconoce hoy que eres pecador, y entiende que Jesús desea juntarse contigo, y bendecirte!
Wilda M.V.
(Referencia: Nuestro Pan Diario)
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