jueves, 6 de octubre de 2016

"Una vida que consiste en llegar a ser"

Meditación 06/10/16
2 Corintios 4.7-18 "Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros, que estamos atribulados en todo, mas no angustiados; en apuros, mas no desesperados; perseguidos, mas no desamparados; derribados, pero no destruidos; llevando en el cuerpo siempre por todas partes la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nosotros. Porque nosotros que vivimos, siempre estamos entregados a muerte por causa de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestra carne mortal. De manera que la muerte actúa en nosotros, y en ustedes la vida. Pero teniendo el mismo espíritu de fe, conforme a lo que está escrito: Creí, por lo cual hablé, nosotros también creemos, por lo cual también hablamos, sabiendo que el que resucitó al Señor Jesús, a nosotros también nos resucitará con Jesús, y nos presentará juntamente con ustedes. Porque todas estas cosas padecemos por amor a ustedes, para que abundando la gracia por medio de muchos, la acción de gracias sobreabunde para gloria de Dios. Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día. Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria; no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas".
El mayor obstáculo para entender el propósito de Dios cuando Él nos quebranta es que un gran número de cristianos piensa que tener fe en Cristo es algo que hacemos. Oramos, leemos la Biblia, vamos a la iglesia, ofrendamos. Hacemos y hacemos, creyendo que ésa es la vida cristiana.
Pero el verdadero cristianismo consiste en llegar a ser, en vez de hacer. La vida de fe que Dios ha dispuesto involucra recibir a Jesús en nuestros corazones, y permitirle que Él cambie los hábitos, la manera de pensar y las preocupaciones que tenemos, para llegar a ser más y más como Él.
Comprender esto cambiará nuestra perspectiva en cuanto a los dolores que debemos soportar. Cuando reconocemos que la vida cristiana es la obra permanente de Jesús de rehacer nuestra vida, el papel del quebrantamiento tiene más sentido. Es el proceso que Dios usa para apartarnos de las cosas que se han vuelto, o pueden llegar a volverse en un obstáculo para nuestro crecimiento. El Señor utiliza también este recurso para tratar asuntos que posiblemente hemos declarado “prohibidos” para Él, como conductas o relaciones poco saludables que justificamos.
Dios no quiere ser el Señor de la mayor parte de su vida, ¡Él quiere ser el Señor de toda su vida! Por tanto, se concentra en las áreas de rebeldía y de autosuficiencia para despojarnos de todo lo que nos impide confiar plenamente en Él. El Señor utiliza el quebrantamiento para eliminar esas inclinaciones, para que podamos vivir dependiendo de Él, día tras día. Abra su corazón, y pídale al Señor que le muestre cualquier rastro de autosuficiencia en su vida.
(De Encontacto.org)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

ESA GRACIA INMERECIDA DE DIOS

27.11.2024 SANTIAGO 1.17-18  “ Toda buena dádiva y don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, n...