Meditación 16.5
Mateo 7.7-
8 "Pedid, y se os
dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque todo aquel que pide,
recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá".
Como hemos
visto, hay un patrón para buscar la
dirección de Dios.
Paso 1: La limpieza:
Realmente importante en todo el proceso. De hecho, casi todos los pasos
restantes no tienen ningún orden en particular, y pueden articularse en muchos
aspectos.
Paso 2: Entrega.
El Señor no puede compartir sus planes para nuestra vida hasta que nos
comprometamos a seguirle, pase lo que pase. Él sabe si estamos buscando su dirección para obedecer, o
simplemente para pensar en lo que Él dice.
Paso 3: Pedir. 1 Juan 5.14-15 dice que el Señor nos escucha y concede nuestras
peticiones cuando pedimos conforme a su voluntad. Es posible hacer
peticiones que no son de Dios, pero creyentes
que se rinden a Él sabrán cómo pedir correctamente, por lo que recibirán la
mejor respuesta posible.
La mayoría de veces, Dios guía a los creyentes
a una respuesta por medio de su Palabra; por esta razón animo a las
personas a meditar en Ella (Salmos 119.105).
Nuestra lectura puede
llevarnos al pasaje que trata nuestra situación, o revelarnos un principio aplicable. A veces, Dios da un mensaje
clarísimo al corazón de una persona, que nadie más encontraría en ese pasaje
específico. La clave es creer que el
Señor le guiará, y tener esa fe (Marcos 11.24).
El proceso de buscar dirección suele ser lento, por
lo que debemos esperar. Adelantarse y manipular las circunstancias puede ser un
error costoso.
El Soberano del
universo actúa a favor de quienes esperan en Él (Isaías 64.4). Si
usted busca su dirección, la recibirá. (De Encontacto.org)
No hay comentarios:
Publicar un comentario