Viernes 31.3.17
Jeremías 32.27 "…yo soy Jehová, Dios de toda carne; ¿habrá algo
que sea difícil para mí?"
Si para este momento estás atravesando un proceso confuso o doloroso, no sientes la gloria de Dios, ni ves nada a tu favor; te
quiero recordar que es normal, que en los procesos dolorosos sientas que nada
positivo ocurre, o que todo está como suspendido en el aire, pero es el momento
preciso para levantar tu fe!
Isaías 41:10
te dice: "No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque Yo Soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te
sustentaré con la diestra de mi justicia".
Si le crees,
honras y obedeces, Dios actuará en el proceso que atraviesas… y aunque no ves
nada hoy, Él ya ha iniciado la obra: Para Dios no hay imposible (Lucas 1:37).
Es necesario
restaurar e incrementar tu fe. Si tan solo fuera como un grano de
mostaza, lo lograrás! Así le dijo Jesús a sus discípulos… también te lo dice a
ti hoy (Mateo 17.20).
Tira de lado
tu cimiente débil, párate en fe, confía y camina de la mano con Jesús… No lo
puedes ver, pero es tan real como el aire que respiras. Míralo a Él.
Tienes hambre de fe? Él es el pan que alimenta tu fe!
Tienes sed de fe? Él es
el agua que sacia tu fe!
Estás en tinieblas de fe? Él es la luz que ilumina tu
fe!
Con Jesús
todo se renueva. Pon todo a Sus pies; y cuando veas que no hay nada,
que no pasa nada; es momento de agradecer a Dios por todo lo que hará.
Aprenda a esperar lo mejor. "Yo hago
nuevas todas las cosas" (Apoc. 21.5).
Nada es
imposible para Dios. Arriba la fe… y que Dios te bendiga!
Wilda.
TPSH 9.9.23
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